l pasado martes arribó a la ciudad de Ushuaia el submarino de la Armada Argentina "Salta", para realizar una escala técnica en el marco de la Tercera Etapa de Mar de Adiestramiento Naval. La nave permanecerá amarrada al muelle comercial del puerto local hasta el próximo sábado.
El comandante del submarino, capitán de fragata Guillermo Repetto, explicó que la llegada a la capital fueguina se da en el marco del adiestramiento del personal de la Armada, previsto por el Comando de Operaciones Navales, explicando que de ese adiestramiento también participaron unidades de superficie y de la aviación naval. Señaló que la intención fue realizar un entrenamiento integrado, que permita reforzar los conocimientos propios del personal de la Armada Argentina.
De ese modo, comentó que el operativo se realizó de manera conjunta y también de forma individual de cada unidad, acotando que "se realizó una serie de simulaciones de guerra, donde las unidades de la aviación naval trataron de localizar al submarino, al igual que los buques que participaron, y nosotros tratamos de realizar nuestro juego".
A bordo del "Salta" se encuentran en total unos 36 hombres, de los cuales 8 son oficiales y 28 suboficiales; este personal, junto con la nave, zarparon del puerto naval de la ciudad de Mar del Plata, el pasado 16 de septiembre, de modo que la llegada a Ushuaia les demandó unas dos semanas, durante las cuales desarrollaron los ejercicios planificados. El comandante Repetto adelantó que mañana sábado, a primeras horas del día, zarparán nuevamente hacia su apostadero habitual, en la localidad bonaerense, donde prevén arribar el próximo 16 de octubre.
Asimismo, manifestó que durante el viaje de regreso realizarán tareas de control y vigilancia del mar, navegando cerca de las 200 millas, como para "aprovechar el viaje hacia Mar del Plata, tratando de detectar la posible presencia de buques pesqueros que se encuentren en infracción".
Respecto de la actividad y la vida dentro de un submarino, el capitán anotó que es bastante particular, teniendo en cuenta que "son actividades distintas, ya que los ambientes son muy reducidos y la convivencia a bordo es fundamental porque todos estamos en permanente contacto". Las actividades habituales que desarrolla están relacionadas al adiestramiento del personal, subrayando que "un submarino sigue siendo un buque de guerra, por lo tanto nuestras actividades principales son la preparación de todo el personal ante eventuales situaciones de conflicto".
Recordó que el "ARA Salta" fue construido hace 33 años, por módulos, en la Argentina. Aclaró que "a pesar de que sea un poco viejo, a mediados de 1995 se le efectuó una reparación de media vida, por lo que calculamos que podrá funcionar otros 10 ó 15 años más, sin ningún inconveniente". Anotó que puede navegar hasta una profundidad máxima de 250 metros y a una velocidad de 45 kilómetros por hora, que "bajo el agua es bastante rápido". Tiene unos 55 metros de largo y 6,30 metros de diámetro, pero la capacidad real para el desenvolvimiento de la gente dentro de la nave es de tan sólo 30 metros.
Por su diseño, esta embarcación puede permanecer sumergida y en actividad hasta 50 días como máximo, tanto por su capacidad como por la resistencia psicofísica del personal.
