ste lunes dio inicio el debate oral y público contra Sebastián Funes, quien en septiembre del año pasado habría sido protagonista de un cinematográfico robo en una panadería de la Margen Sur, de Río Grande, la que asaltó a punta de pistola.
El Tribunal de Juicio Oral, compuesto por los Dres. Juan José Varela, Eugenio Sarrabayrrouse y Federico Carniel, comenzó esta mañana con el debate oral del único imputado en la causa.
Funes es defendido y representado por el Dr. Juan Ladereche, mientras que en la fiscalía se hallan los Dres. Cecilia Incardona y Fernando López Robbio.
Por su parte, el nuevo fiscal aseguró que los relatos testimoniales de la fecha fueron "bastante contundentes en su manera de ver los hechos". En su momento, hubo dos detenidos más en tanto que a los pocos días de ocurrido el robo y de encontrarse detenidos quedaron en libertad por falta de mérito, mientras que el único responsable hallado en este robo con armas fue Sebastián David Funes.
Por qué se lo imputa
La noche del 22 de septiembre del 2007 se produjo el violento robo en el mercado Ka-My de calle Hoikén 637. Allí ingresaron tres sujetos con sus rostros tapados por pasamontañas y medias de nylon, armados con un revólver y una carabina.
El local era atendido en ese entones por Enzo González de 23 años, quien recibió un culatazo en la cabeza, y una joven identificada como Sara Esther Barboza, también de 23, quien fue amenazada con una –presunta– arma de fuego en la cabeza y conducida a la vivienda a la que conecta este local comercial.
Casualmente, un amigo de la misma, el suboficial Hugo Alfonso, quien se encontraba de servicio y formaba parte del apoyo a la guardia del Comando de Operaciones, se hallaba en el lugar por esas horas y debió intervenir, iniciándose así un enfrentamiento con los delincuentes. En tanto, uno de ellos resultó herido de bala en el hombro.
