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uncionarios provinciales brindaron el viernes pasado una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, con el fin de ampliar detalles acerca de los resultados del allanamiento realizado a la clínica CEMEP, donde se hallaron recientemente elementos sustraídos del Hospital Regional Río Grande.
En ese sentido, la secretaria de Legal y Técnica Eleonora de Maio confirmó que paralelamente al proceso judicial que ya tiene una persona sospechada, el Gobierno provincial instruirá los sumarios administrativos correspondientes para determinar si hay más personas involucradas en el hecho delictivo.
Así, De Maio explicó que el allanamiento "se llevó a cabo por una orden del juez Pablo Bramati", tras el cual se encontraron en el CEMEP "elementos que habían sido fotografiados por uno de los enfermeros que trabaja en el Hospital y en ese mismo Centro Médico", lo que fue comunicado a la entonces subsecretaria de Gestión Sanitaria de la Zona Norte Cristina Aguado, quien radicó la correspondiente denuncia penal.
Por su parte, la secretaria de Asuntos Jurídicos Laura Alfaro aseguró que los que resulten involucrados en la causa "serán separados de sus cargos para evitar que entorpezcan la investigación", teniendo en cuenta que "estamos hablando de elementos que pertenecen a un hospital público y que eran utilizados en un instituto privado". En ese sentido, la funcionaria consideró que el hecho "atenta directamente contra la salud pública".
Por otro lado, el subsecretario de Políticas de Salud José Gómez Carrillo indicó que desde el Gobierno se buscará determinar con precisión "cómo estos elementos salieron del hospital", y de qué manera se eludieron los controles, ya que "esta situación tendría que haber sido detectada por autoridades del Hospital". Así, señaló que "los elementos encontrados tendrían grabadas las iniciales del Hospital", entre los que se incluyen "pinzas, estetoscopios y una riñonera que es una especie de bandeja de acero inoxidable".
Por su parte, el secretario de Comunicación Institucional Leonardo Gorbacz expresó su preocupación y la del Gobierno de la Provincia por este hecho, y aseguró que la gobernadora Fabiana Ríos "ha instruido a la Secretaría Legal y Técnica y al Ministerio de Salud para que hagan todo lo que esté a su alcance para investigar no sólo esta situación puntual, sino además cuáles son los mecanismos que no están funcionando, y así evitar que ni una sola curita vuelva a salir del hospital".
Gorbacz expresó además que "siempre una estafa al Estado duele", sobre todo "en medio de las dificultades que atraviesa la Provincia y el esfuerzo que se realiza para equipar con insumos los hospitales públicos".
Finalmente, el funcionario reconoció que "ha habido y sigue habiendo carencias, a pesar del esfuerzo que hace el Ministerio de Salud de la Provincia y de la ayuda que nos brinda la Nación", por lo que "descubrir que hay elementos que entran por una puerta y salen por otra duele y mucho", teniendo en cuenta que "estos elementos que no están en el hospital, son elementos que le faltan después al ciudadano fueguino que depende del servicio que brinda el nosocomio".
