Devolviendo a Ushuaia parte de lo que Ushuaia nos da

Nadia Coman, su paso por la Selección Nacional de Hockey Pista

19/12/2010
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engo 31 años, nací en la ciudad de San Miguel –Buenos Aires– estoy en pareja hace quince años, tenemos una hija de 6 que se llama Martina. Trabajo en salud, soy agente sanitario.
Comencé a jugar al hockey a los 12 años en el Ushuaia Rugby Club donde me formé como jugadora. Con el transcurso del tiempo muchas de mis compañeras dejaron el club porque se iban a estudiar. Así empecé en otra institución, Las Águilas. Ahí jugué un par de años y por malos entendidos dejé de pertenecer a él formando un club nuevo: Los Ñires, que está funcionando hace un año. Tenemos varios chicos y hay muy buen semillero.
En lo deportivo a nivel nacional, en un torneo de hockey en Bariloche, vieron jugar unos partidos a nuestro equipo, seleccionadores que estaban por formar la Selección Argentina de Hockey Pista. Nosotras no sabíamos nada de eso y cuando terminamos el torneo nuestro entrenador nos contó que tres de nosotras estábamos elegidas para formar parte del plantel, y una de ellas era yo. En ese momento algo se detuvo, jamás me hubiera imaginado que me podía tocar a mí, no paraba de llorar de alegría, era el sueño de mi vida. Como para diciembre nos convocaron al entrenamiento en el CeNARD donde la carga horaria de los mismos duraba desde el viernes al domingo, nueve horas diarias fraccionadas en tres. Todo era dentro del CeNARD, un lugar increíble.... Y especial !!!
Nos levantábamos a las 7am para desayunar, luego nos íbamos a cambiar para el comienzo del entrenamiento con una buena entrada en calor. Cortábamos para comer, volvíamos después de un pequeño descanso para seguir hasta la hora de la merienda. Ahí no había descanso, se terminaba y seguíamos con el entrenamiento a full. Alrededor de las 20.30 era nuestra etapa final del día, y nos preparábamos para ira cenar... Lo mejor después de un duro entrenamiento. Así fueron esos los tres días... un experiencia única.
Tuvimos que regresar al CeNARD una vez cada mes para seguir con los trabajos mientras continuábamos nuestros entrenamientos aquí en nuestro lugar. No fue fácil ya que teníamos que seguir con el club, el gimnasio y además incorporar al circuito a la familia y el trabajo. Por suerte me pude organizar bastante bien gracias al apoyo incondicional de mi pareja que me acompañaba cuando me tocaba salir a correr varios kilómetros para mantener el buen estado físico, y llegar a óptimos rendimientos. Así estuve dos años formando parte de la Selección Argentina de hockey. Participe del torneo Cuatro Naciones en Trelew donde nos hicieron entrega de las primeras camisetas, fue algo sumamente increíble. Salimos campeonas en esa oportunidad, fue todo un festejo. También estuvimos en un Panamericano en San Juan donde también salimos campeonas ganándole a EE.UU. A eso le sumamos un Test Mach en Uruguay que también ganamos.
Esa fue mi pasada por la selección con un grupo humano más que perfecto. Todo era como un sueño del cual no quería despertar jamás, sueño que lo aproveché al máximo... Toqué el cielo con las manos...!!!, pero todo tiene un final. Ahora sólo me queda por dejar lo aprendido a nuestros chicos y saber que los sueños se hacen realidad cuando en ellos ponés amor, pasión, dedicación y el corazón.
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