Ayer 21 de septiembre

Kau Yak recibió la primavera con un gran festejo

21/09/2011
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a Fundación Kau Yak de Ushuaia celebró ayer el Día de la Primavera y del Estudiante, con un festejo a todo color, que tuvo lugar en la Casita de Nazaret, sede de la ONG. La celebración, que movilizó a toda la organización integrada por quince chicos con capacidades especiales y sus familias, en esta ocasión tuvo como invitados a un grupo de niños que se encuentran en resguardo de Minoridad y Familia de la Provincia, con quienes compartieron una tarde repleta de divertimentos y sorpresas.
La presidenta de Kau Yak, Beatriz Speziale, destacó a EDFM que “ésta es una buena oportunidad para promover la integración entre nuestros chicos y otros grupos de la sociedad, que a su vez pueden conocer otras realidades como la que viven las personas con capacidades especiales” y adelantó que “la idea seguir propiciando este tipo de encuentro en el Valle de Andorra donde tenemos un espacio, que gentilmente fue cedido por la Municipalidad de Ushuaia mediante convenio, que podemos compartir con ellos y con otras entidades que lo necesiten, “aunque reconoció que “ a veces nos cuesta llegar por las condiciones del camino y la falta de recursos, puesto que funcionamos con el esfuerzo de todas las familias y es mínimo el acompañamiento oficial que tenemos “.
En ese sentido, la referente manifestó que “para nosotros todo lo que emprendemos es una verdadera lucha, por que siempre encontramos palos en las ruedas, en lugar de encontrar mayor acompañamiento de las autoridades responsables”, al anotar que “justamente lo que buscamos es cubrir un bache que deja el estado en materia de contención de adolescentes que padecen de discapacidad en la provincia y que a los 16 años quedan desescolarizados”, lamentó la mujer.
En el transcurso de la tarde de ayer, 21 de septiembre, la fiesta incluyó una merienda y la entrega de obsequios y juguetes donados por un grupo de alumnos del Colegio Los Andes, de las 640 Viviendas. Además se realizaron obras de teatro, por parte una profesora de bio–danza, y se contó con el acompañamiento de vecinos voluntarios, docentes de Cultura Provincial y miembros de la Iglesia María auxiliadora que se acercaron a colaborar con este evento especial.