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as más de 60 agencias de azar que funcionan en la Provincia se ven afectadas por la suspensión del servicio del sistema informático mediante el cual se realizan las apuestas, a partir de una deuda que mantiene el IPRA con la empresa. “El IPRA reconoció la deuda y le echó la culpa a la crisis, pero eso no tiene nada que ver: el dinero que todos los agencieros abonamos debería haber sido utilizado para cumplir con la obligación económica con el servidor del servicio informático”, afirmó un agenciero local.
Referentes de distintas agencias de azar de Ushuaia manifestaron ayer su preocupación por la suspensión de juegos de azar informatizados en toda la Provincia, a partir de una importante deuda que mantiene el Instituto Provincial de Regulación de Apuestas (IPRA) con la empresa que brinda el sistema informático.
En diálogo con EDFM, “Beto” Gortan, reconocido agenciero de la cuidad, advirtió sobre la suspensión del servicio que brinda la empresa a partir de una deuda económica que mantiene el IPRA hace varios meses.
“El viernes pasado empezó a fallar el sistema; no pudimos ingresar todas las apuestas, el sábado empeoró la situación y este lunes no pudimos levantar apuestas de ninguna clase”, indicó, y agregó que “el lunes fui a pagar, como siempre, y cuando pregunté por qué no podía levantar la jugada, allí mismo me informaron que hace unos 15 días llegó un telegrama informando la deuda que el IPRA había contestado diciendo que no se debía nada” a partir de lo cual “evidentemente la empresa decidió suspender el servicio”.
Gortan señaló que en transcurso de la mañana de ayer “nos enteramos de que el IPRA debe alrededor de 4 millones de pesos, que la plata que abonamos diariamente por las máquinas nunca fue destinada a abonar el servicio de la empresa” y cuestionó “el desmanejo que existe dentro del Instituto, porque no puede ser que nosotros cumplamos siempre con el pago que nos corresponde, y que ese dinero no haya sido destinado a lo que correspondía; nosotros cumplimos económicamente, y no se justifica la deuda”.
El titular de la Agencia N°45 se refirió a las declaraciones del secretario Administrativo a cargo de la Presidencia del IPRA, Jorge Giménez, que aunque evitó brindar precisiones, justificó la situación en una “estrategia comercial” del Instituto, al indicar que “estamos en una crisis por la cual la prestador del servicio lo ha suspendido. Sé que los agencieros están perdiendo dinero y que el IPRA está perdiendo dinero, pero estamos trabajando para reestablecer el servicio”.
Gortan lamentó “el error del IPRA de manejarse de esta manera; si fue una estrategia comercial decir que no deben nada y generar como consecuencia que la empresa corte el servicio, les salió muy mal”, al advertir que “esta situación traerá pérdidas económicas enormes;hace 25 años que estoy en esta actividad y tengo 7 empleados a mi cargo, cuyas familias esperan cobrar a fin de mes; tengo que abonar dos alquileres de locales comerciales, y todas las obligaciones fijas mensuales”, y afirmó que “es una cadena de responsabilidades muy grande; una situación complicada”.
El agenciero adelantó que “personalmente, no me voy a quedar con los brazos cruzados por un error que no es mío; no puedo permitir que por un incumplimiento del IPRA se vea perjudicado mi trabajo y mi negocio, sobre todo porque yo he cumplido, como todos los agencieros, abonando lo que nos corresponde siempre”, a partir de lo cual en el día de ayer “envié la carta documento correspondiente al IPRA, y este martes presentaré una nota por mesa de entradas, esperaré unos días y si la situación no cambia iniciaré las acciones legales que correspondan”.
En tal sentido, Gortan explicó que los agencieros “tenemos contrato con el IPRA para la comercialización del juego y pagamos un canon de uso para asegurar la actividad; por lo que el IPRA no está cumpliendo el contrato, cuando nosotros sí cumplimos”, y advirtió que “evidentemente creen que pueden jugar con nuestro trabajo y nuestro negocio cuando quieren, mientras esto nos perjudica muchísimo”.
“El IPRA reconoció la deuda y le echó la culpa a la crisis, pero eso no tiene nada que ver: el dinero que todos los agencieros abonamos debería haber sido utilizado para cumplir con la obligación económica con el servidor del servicio informático”; al afirmar que “la gran verdad es que la empresa cortó el servicio porque se sumó una deuda enorme durante varios meses, y la solución es que el IPRA abone lo que debe, lo que parece muy difícil porque se trataría de 4 millones de pesos”.
Para finalizar, el titular de la Agencia N° 45 adelantó que “seguramente habrá novedades en los próximos días, esto recién empieza”, aunque observó que “si esto no se soluciona, nosotros seguimos teniendo gastos pero no vemos ganancia, y es preocupante”.
La voz del IPRA, imposible
Con la intención de conocer la versión del Instituto Provincial de Regulación de Apuestas, EDFM intentó ayer obtener declaraciones del secretario Administrativo a cargo de la Presidencia, Jorge Giménez, lo que no se consiguió por encontrarse ausente en la sede del Instituto.
