a especialista en Psicogerontología e integrante del Programa Provincial de Envejecimiento Saludable, Liliana Moyano, explicó que durante el desarrollo de la propuesta se proyectaron “casos de personas con la enfermedad para que los que participantes hagan preguntas”.
La profesional ponderó la participación activa de la gente a lo largo de la jornada, situación que justificó en el hecho de que “es un tema que llega mucho y hubo historias muy fuertes”.
En cuanto a la patología, explicó que el Alzheimer se trata de “una enfermedad degenerativa que es progresiva y no tiene una cura”, pero observó que “lo que sí podemos hacer es prevenir la enfermedad con anticipación, estimulando la memoria, realizando actividad física, teniendo una vida saludable, con una dieta saludable, controlando la diabetes, la hipertensión y el colesterol”.
“Todo eso ayuda a prevenir la enfermedad” aseveró, aunque anotó que “hay dos tipos de Alzheimer” para precisar luego que “uno es hereditario y se da en un 10 por ciento de los casos; y otro que se da en el 90 por ciento de los casos y sus causas son desconocidas”.
Además, señaló que “el diagnóstico se hace de manera anatomopatológicamente, porque se deposita una sustancia mieloide en el cerebro y hay un corte de la sinapsis en las neuronas cerebrales”.
“El Alzheimer familiar se puede dar en grupos de personas muy jóvenes, de cuarenta años en adelante” alertó, situación que comparó con la patología que no tiene predisposición familiar, “que se da, generalmente, en edades más avanzadas”.
Otra de las características de la enfermedad señalada por la profesional, consiste en que “tienen una evolución muy larga”, al punto tal que “quince años antes se comienza con pequeñas pérdidas de la memoria, que muchas veces es tomada como algo normal del envejecimiento, cuando en realidad se trata del inicio de la enfermedad”.
En cuanto a la situación de esta patología en la Provincia, a doctora Moyano aseveró que “estamos dentro de la media del País” y resaltó que en Ushuaia “existe un taller de reflexión de familiares de personas que padecen cualquier tipo de demencia, que funciona cada quince días”.
