na curiosa postal se aprecia en el “quema...” de hoy. Alguien, con pocos escrúpulos, decidió apropiarse del Paseo del Centenario para convertirlo en su estacionamiento. O tal vez necesitó exhibir su vehículo en busca de concretar una posible venta.
Lo cierto es que uno está acostumbrado a ver irregualridades en lo que tiene que ver con los espacios utilizados para estacionar, pero en esta se le fue la mano.