Juicio por trata de personas en el local nocturno Sheik

Comenzó una extensa ronda de testimonios después de las palabras “desgarradoras” de Alika

La primera víctima de trata querellante contra sus captores habló durante casi cinco horas ante el Tribunal Oral Federal y dio detalles “impactantes”, según reconstruyeron ayer varios de los asistentes a la audiencia reservada del lunes a la noche. En la víspera, el juicio continuó con una ronda de declaraciones testimoniales que podría finalizar mañana. Hay tres personas acusadas de integrar una red de explotación sexual desbaratada en 2012, tras el allanamiento al conocido prostíbulo de la ciudad.
09/11/2016
E

l primer juicio oral y público del país donde una víctima del delito de trata de personas es querellante contra sus captores ingresó ayer en su segunda jornada luego del testimonio “desgarrador” que prestó el lunes la propia mujer, en una declaración de casi cinco horas prestada ante el Tribunal Oral Federal de Tierra del Fuego.
Alika Kinán, de 40 años, convertida en una conocida activista de los derechos de género, testificó a puertas cerradas, sin público y sin la presencia de los tres acusados que tiene el caso donde se juzga una presunta red de trata desbaratada en 2012, tras el operativo realizado en el local nocturno “Sheik” ubicado en pleno centro de la ciudad de Ushuaia.
La jornada inaugural del juicio finalizó a las 23 del lunes en la sala de audiencias de los tribunales provinciales, mientras que el proceso se reanudó ayer a la mañana a las 9, en la sede natural del Tribunal Federal, en el segundo piso de un edificio céntrico, de muy acotadas dimensiones.
Los jueces Ana María D`allesio,  Luis Giménez y Enrique Guanziroli explicaron que el cambio de lugar obedece a que la sede federal cuenta con los únicos equipos homologados por la Corte Suprema para tomar testimonios por videoconferencia, algo que se repetirá varias veces a partir de esta jornada para escuchar a personas que no residen en Tierra del Fuego.
La sala donde ayer se reanudaron las audiencias es tan reducida que solo caben las partes y entre seis y ocho personas más, aunque fue suficiente para albergar a periodistas y a representantes de organizaciones feministas que acuden en apoyo de Alika.
El tribunal escuchó ayer a la mañana a un testigo “de concepto” ofrecido por la defensa de Lucy Alberca Campos, ex encargada del local nocturno donde se realizaba la presunta explotación sexual de mujeres.
Campos es la única acusada que está presa, porque la misma Justicia Federal de Ushuaia le dictó el lunes un procesamiento como coautora del delito de tráfico de drogas en una causa diferente.
En cambio Pedro Eduardo Montoya y Claudia Ivana García, el matrimonio sindicado como propietario de “Sheik”, se encuentra en libertad.
El fiscal general de la provincia, Adrián García Lois, había pedido que una declaración prestada por Kinán y por otra presunta víctima, en la causa donde procesaron a Campos, fuera incorporada al juicio, pero los jueces se lo denegaron.
García Lois sostuvo que el testimonio de la víctima y querellante de la causa, durante la audiencia que terminó antenoche, fue “de una dureza elocuente” porque “una cosa es haber leído sus dichos anteriores y otra es escuchar en primera persona cómo fue todo el proceso de captación de una víctima, y las condiciones en que fue sometida a explotación durante su paso por el prostíbulo”, advirtió.
El funcionario judicial aclaró que pese a las versiones acerca de que Kinán nombraría a personas influyentes durante su declaración, la mujer “solo se limitó a contar su propia experiencia”.
La representante legal de Alika, Marcela Rodríguez, coordinadora del “Programa de Asesoramiento y Patrocinio para Víctimas del Delito de Trata de Personas”, que depende de la Defensoría General de la Nación, dijo que la actitud de la mujer “tiene que servir para animar a otras víctimas a que asuman posturas similares”.
La misma definición tuvo el titular de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) Marcelo Colombo, quien viajó especialmente a Ushuaia a participar del proceso.
Pese a las horas que habló ante el tribunal, Kinán se presentó ayer en la reanudación del juicio, e hizo valer su derecho como querellante de presenciar las actuaciones.
“Por ahora no quiero hablar. Mantengo esta posición que asumí desde días antes del juicio”, dijo la actual presidente del Instituto de Género “Sapa Kippa”.
Fuentes judiciales estimaron que la ronda de testimonios del juicio se extendería hasta el jueves inclusive, para abarcar la lista de 29 personas que hasta el momento fueron citadas por las partes.

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