ste día, la Fuerza Aérea Argentina informa del exitoso ataque al destructor inglés “HMS Conventry”, que se hundió veinte minutos después causando la muerte de 19 marinos británicos, y que el buque portacontenedores “Atlantic Conveyor” corrió la misma suerte al ser atacado por unidades de esa fuerza.
Este ataque, en medio de la Guerra de Malvinas, obligó a los británicos a replantear su estrategia de combate; dado que la “Royal Navy” había subestimado la capacidad aérea de nuestro país y fue sorprendida por la habilidad de los aviadores argentinos.
La táctica empleada por los pilotos fue la de volar a ras del agua, para evitar la detección de los radares de los buques británicos, burlando los modernos sistemas antiaéreos.
Luego de cada acción de combate, los aviones argentinos debían volver rápidamente hacia sus bases en el continente antes de que se les agotara el combustible. En el retorno quedaban expuestos a los ataques de las patrullas de aviones “Harrier” que salían a cazarlos.
Muchas más unidades británicas pudieron haber sido hundidas, ya que fueron numerosas las bombas lanzadas por los aviones argentinos que no explotaron al alcanzar el objetivo o que atravesaron de lado a lado los cascos de los buques sin estallar. Según algunas opiniones, el poder destructivo de las bombas MK-17 debiera haber podido provocar la destrucción de cada nave impactada. El motivo del fallo en el mecanismo obedeció a los defectos que presentaban los artefactos y a la baja altura a la que los aviones debieron efectuar sus ataques, para evitar la acción de los radares y de los misiles antiaéreos británicos, junto al hecho de que se carecía de paracaídas para lograr un impacto retardado de las bombas.
El portaaviones inglés “Invincible”, al ser atacado quedó seriamente averiarlo. Dos aviones de la Armada lanzaron un misil “Exocet”, que impactó, y otros cuatro de la Fuerza Aérea atacaron de forma directa al estratégico navío.
La aviación argentina sufrió la pérdida de 55 de sus miembros y 47 aeronaves. Las bajas del Reino Unido ascendieron a 348 hombres muertos y 777 heridos, 34 aeronaves y ocho buques hundidos o destruidos. Se estimó que veinte buques fueron alcanzados por los aviones y misiles argentinos, de los cuales algunos sufrieron ataques en más de una oportunidad.
