Arriban más selk´nam refugiados a la Misión La Candelaria
El 19 de julio de 1899

Arriban más selk´nam refugiados a la Misión La Candelaria

19/07/2017
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ste día, según consigna la crónica de la Misión La Candelaria, llegan "los indios Lucas, Zacarías, Lino y otros siete"; tres días después salían "Zacarías, Lino, Isidoro y otros tres", mientras que el 7 de agosto volvían "Zacarías y otros siete; nueve mujeres, tres criaturas y el muchacho José Marías Bodas", haciendo de la sede salesiana un recurrente “lugar de parada para los desplazados fueguinos” sobretodo en los primeros años de las estancias argentinas (Joaquín Bascopé Julio. Desvíos salesianos. La expedición de 1906 y los misioneros volantes).
Esta circulación de refugiados, consistía fundamentalmente “de hombres en tránsito”, que, a medida que morían en los combates, los arribos a la misión” se reducían a “mujeres y niños que ahora ya no transitaban, sino que, llegado el caso, huían de la misión. De ahí el interés de ésta, desde principios del nuevo siglo, por reclutar nuevos asilados”.
La expedición realizada por salesianos en 1906 al interior fueguino reflejó el drama que estaba aconteciendo. “El pasaje central del relato es el hallazgo de dos cuerpos masculinos masacrados. Se trata de dos miembros de la facción de "Felipe 2º" o "Felipe Ventura", guía de la expedición e informante de los hechos. Felipe era un visitante ocasional de la misión y el acoso estanciero lo había conducido junto a las víctimas ("Gregorio" y "Mateo") a los territorios de (…) Vicente Taäpelht. Éste, junto a Juan Fuego Terwan o Juan Fraile, quien habría raptado a Matilde, la mujer de Felipe, eran los probables victimarios. Considerando que "el principal objeto de estos crímenes era la obtención de mujeres". A los que se sumaban los forasteros, mayoritariamente solteros.
Los salesianos pudieron constatar a “fueguinas conviviendo con ovejeros (…) contamos diecisiete familias ovejero-fueguinas cuyos hijos fueron bautizados en puestos y comisarías (…) La abundancia de hombres solteros volvió común este tipo de relaciones en el contexto colonial, con más o menos violencia masculina. Incluso el misionero Ferrando, que participó en la expedición de 1906, asistiría a Zenone hasta 1912, cuando "desertó de las filas salesianas para unirse civilmente con una india". También abundó el secuestro o adopción forzada de niños para servidumbre doméstica, Gusinde denunció "la ´moda` de que las familias más pudientes acogieran un niño selk`nam".

Autor : Bernardo Veksler
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