Un camión con motor de vapor comienza a transportar cargas
El 29 de diciembre de 1910

Un camión con motor de vapor comienza a transportar cargas

29/12/2017
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lrededor de esta fecha, la Sociedad Explotadora de Tierra del Fuego introduce en la zona austral la última innovación en tecnología: un camión con motor de vapor. Las unidades fueron adquiridas a la empresa “Albion Motor Car Company Limited, de Scotstoun, Glasgow, que gozaba de renombre por la excelencia de su producto, exclusivamente camiones, que venía fabricando desde 1899” (Mateo Martinic B. Los comienzos del transporte mecanizado terrestre en Magallanes).
La empresa ya estaba utilizando unos tractores Mc Laren con una tecnología similar.
Las unidades no demoraron en llegar, “aunque no se sabe la cantidad de vehículos que pudo comprar”.
En esos años, el motor de vapor estaba muy evolucionado. Su mantenimiento era económico y su duración prácticamente ilimitada; pero, eran lentos, voluminosos, peligrosos en caso de accidente, y se tardaba mucho tiempo en calentar las calderas para arrancar. Algunas unidades aún funcionaban en los años ´70 en ex colonias inglesas.
“Para entonces la noción acerca de la utilidad práctica de los auto-camiones se había generalizado como para que un pequeño empresario hotelero y también ganadero como era Rogelio Figueroa (…) pensara en una eventual adquisición. Así hemos podido constatarlo por una nota de fecha 5 de febrero de 1913 que obra en su correspondencia y dirigida a la firma comercial importadora Auby Company, manifestándole su interés por comprar un camión automóvil con capacidad de 3 ó 4 toneladas. Que sea solvente en caminos con gradiente y la mayor parte del año con barro”.
Algunas de las experiencias en la zona austral no fueron muy auspiciosas. Como fue el caso “de la importación hecha por Juan Rudd, propietario de la estancia "Cabo Buen Tiempo", en el vecino Territorio de Santa Cruz (Argentina), quien compró en 1912 un camión "Commer", con ruedas traseras de hierro que utilizaba keroseno como combustible, pero que no dio resultado”.
Los primeros camiones con motor a explosión no tardaron en llegar. Se trataba de “una máquina de chasis corto, ruedas macizas (las traseras dobles); ñato, es decir con la cabina abierta sobrepuesta, dejando espacio para el asiento del conductor y de un ayudante, y motor con un gran radiador. Su capacidad de carga era de unas tres toneladas y media” que “se compensaba con la mayor velocidad que brindaba su motor a gasolina” (op.cit.).

Autor : Bernardo Veksler
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