os dos tripulantes que habían navegado a bordo del ARA San Juan y que por distintas circunstancias se bajaron en Ushuaia, declararon ayer testimonialmente ante la Jueza de Caleta Olivia que lleva adelante la investigación de la desaparecida embarcación.
Se trata de Juan Gabriel Viana y Humberto René Vilte, ambos habían llegado en el submarino hasta la capital fueguina, pero por razones de índole personal y de adiestramiento no continuaron a bordo del sumergible que desapareció en las aguas del Atlántico Sur a mediados de noviembre del año pasado. Ambos coincidieron en señalar que el sumergible tubo desperfectos, aunque los mismos “no afectaban la navegabilidad”.
La jueza Marta Yáñez fue la encargada de tomarle ayer por la mañana declaración en calidad de testigos a ambos integrantes de la Armada, en la sede del juzgado federal de Caleta Olivia. La Magistrada investiga la desaparición del submarino ARA San Juan e intenta llevar claridad a las posibles causas que llevaron al hundimiento de la embarcación. Tanto Viana como Vilte se bajaron en Ushuaia, justo antes de que el submarino desapareciera con 44 de sus compañeros a bordo.
Viana se bajó del submarino para viajar a Perú por un curso de capacitación y Vilte (que no formaba parte de la tripulación estable y habría sido invitado de cortesía) debía estar con urgencia en Jujuy por la enfermedad de su madre. Por eso, su destino fue diferente al de sus 44 colegas.
Con el testimonio de los marinos, la jueza intentó sumar elementos para reconstruir cuáles eran las condiciones de navegabilidad del ARA San Juan al momento de su última partida. Por eso, les preguntaron especialmente si la nave había tenido desperfectos antes de zarpar hacia Mar del Plata.
Su declaración, que comenzó temprano y se extendió hasta última hora, fue confirmada a Clarín por Luis Tagliapietra, padre de Alejandro, uno de los submarinistas desaparecidos y abogado de más de 20 familiares, que estuvo en el juzgado para escuchar la exposición de los dos tripulantes.
El primero en declarar, y quien más detalles aportó, fue Viana. Luego se interrogó a Vilte, quien coincidió en líneas generales con el testimonio de su compañero, aunque dando menos precisiones. "Dijeron que fueron testigos de un par de desperfectos técnicos en el submarino, aunque menores, que no afectaban la navegabilidad", indicó una fuente con acceso a la audiencia dada a conocer ayer por Clarín.
Durante la jornada de hoy se espera que declare ante la Jueza los auditores de la Armada mientras que el jueves hará lo propio el capitán Enrique Balbi, que es submarinista, fue comandante del ARA Salta y conoció muy de cerca el San Juan, y actualmente es el vocero de la fuerza.
Un dato que tendrá que ser sostenido por los dos auditores es si no fue escuchada la recomendación de los fabricantes del submarino -después de la reparación de “media vida” que se hizo a partir de 2008- de que debían realizarse controles lejos de alta mar, cada 18 meses. Según Tagliapietra, los mismos informes de la Armada no muestran que se haya hecho un solo control en 39 meses.
| Emotivo homenaje en la Antártida La tripulación del rompehielos Almirante Irízar homenajeó a los 44 marinos que viajaban a bordo del submarino ARA San Juan, desaparecidos junto con la nave desde el 15 de noviembre en aguas del Atlántico Sur. Los tripulantes del Irízar, con sus uniformes naranjas, se formaron de manera tal que dibujaron un enorme 44 del color de sus vestimentas sobre las aguas congeladas y blancas del Océano Atlántico, y haciendo la venia del tradicional saludo militar. La foto, que fue tomada desde uno de los helicópteros que acompañó al Irízar hasta la Antártida, fue subida a las redes sociales de la Armada Argentina. El rompehielos llegó el viernes a la Antártida para participar del abastecimiento de las 13 bases permanentes y transitorias argentinas en ese continente. |
