l culminar las últimas acciones de la Campaña del Desierto, la presidencia del General Roca toma interés en la Patagonia y se instalan una cadena de prefecturas marítimas, que consistían en dependencias navales responsables del control de las costas y policía de la navegación, tal como las definió Arnoldo Canclini en su libro “La Armada Argentina en Tierra del Fuego” (p57); siendo la última la de Tierra del Fuego.
La expedición fue llevada a cabo por la “División Expedicionaria al Atlántico Sud”, creada por decreto del 24 de septiembre de 1883 por el presidente General Roca y su Ministro de Guerra y Marina, General Benjamín Victorica. En el decreto se ordenaba “instalar las subprefecturas marítimas creadas por la Ley de Presupuesto” y se debía “designar el personal militar y el material naval” que debía concurrir a realizar aquella operación.
El 28 de septiembre de 1884 fondeó en la ensenada de Ushuaia la División Expedicionaria al mando del Coronel de Marina Augusto Lasserre, con una pequeña escuadra formada por la cañonera “Paraná”, el transporte “Villarino”, el aviso “Comodoro Py” y el cúter “Patagones”; con la misión de fundar la Subprefectura de Marina que sirviese de asiento a la Autoridad Naval, que sea un manifiesto ejercicio de soberanía y ayude, asista y controle la navegación en toda la jurisdicción marítima.
Lasserre y los marinos argentinos fueron recibidos por los pastores anglicanos Bridges, Whaits y Lawrence, que inmediatamente se pusieron a las órdenes del representante de la autoridad nacional. En el informe elevado por el reverendo Bridges al consejo de la South American Missionary Society en Inglaterra, escribió: “El Coronel Lasserre merece ampliamente la estima y el más cálido agradecimiento de nuestro Consejo por las garantías que ha dado, tanto privada como oficialmente, de la continuada independencia de nuestra misión y la pronta asistencia del gobierno argentino”.
Bridges, en correspondencia intercambiada con Lasserre el 29 y el 30 de septiembre, es quien le aconseja que la Subprefectura sea instalada un par de kilómetros hacia el noroeste sobre la bahía, por ser un lugar más abrigado que la península y de fácil acceso al agua potable y leña. Consejo que el coronel acepta por estimar que las condiciones naturales de la bahía eran más favorables.
Pronto se iniciaron los trabajos y para el 10 de octubre la obra estaba terminada, se levantaron cuatro edificios para sede de la Subprefectura, y el día 12 se inauguró oficialmente con la presencia de los misioneros anglicanos especialmente invitados, los empleados de la nueva dependencia, los treinta marineros de la guarnición, los comandantes de cada uno de los buques de guerra y el subprefecto Teniente de Marina Virasoro y Calvo, quien dependía del Prefecto de Tierra del Fuego, el Teniente de Marina Carlos Méndez.
“El buque ‘Comodoro Py’ quedó en la zona pues su Capitán, Teniente de Marina Carlos Méndez, había sido nombrado por Lasserre prefecto marítimo de la zona y debía, con su buque asegurar el servicio de las subprefecturas de Ushuaia y San Juan de Salvamento”, según consta en el libro Historia Marítima tomo VIII del CN (RE) Enrique González Lonzieme.
Los dos primeros gobernadores del Territorio nacional de la Tierra del Fuego fueron el Teniente de Navío Félix M. Paz (1884-1890) y el Practicante Mayor de Marina Mario Cornero (1890-1893).
Por todo lo expuesto, enaltecemos el espíritu de camaradería de todas las instituciones participantes en la construcción de la República, ayer, hoy y cada día, en aras de echar luz y mostrar con respeto y rigor histórico los hechos sucedidos.
Tomando como referencia oficial el significado de ‘Fundar’, según la Real Academia Española, que establece en sus acepciones “Edificar materialmente una ciudad, un colegio, un hospital, etc.”, “Erigir, instituir un mayorazgo, una universidad o una obra pía, dándoles rentas y estatutos para que subsistan y se conserven”, y “Establecer, crear”; es innegable que las acciones llevadas a cabo ad hoc por el Coronel de Marina Augusto Lasserre, sentando soberanía, y continuadas en el tiempo por la Marina de Guerra desarrollando la logística que alimentó el aprovisionamiento, el desarrollo urbano y las comunicaciones con el continente, se constituyeron en el hito fundacional determinante, que signó el nacimiento de la ciudad de Ushuaia.
