Inician un nuevo intento de producir conservas en Patagonia
EL 10 DE ENERO DE 1918

Inician un nuevo intento de producir conservas en Patagonia

10/01/2022
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ste día, inicia su producción ‘La Patagonia Fábrica de Conservas de Pescado’, en bahía Craker, en las proximidades de la boca del golfo Nuevo.
“La fábrica comenzó con un pequeño capital, y fue paulatinamente creciendo hasta disponer incluso de su propio taller de carpintería y hojalatería para la elaboración de las latas y los cajones para el embalaje. La fábrica ocupaba una planta permanente de 6 personas, que en época del trabajo llegaba hasta 10”. También salaban pescados (Adrián G. de Antueno Berisso. Del arpón al palangre).
Uno de sus propietarios era Jerónimo Marinkovich, quien había tenido una experiencia anterior, como encargado del establecimiento ‘La Primera’, que funcionó hasta 1917. Allí se producían “conservas preparadas con pejerreyes, con y sin espinas, en forma de filet, en escabeche (…) También se industrializó “robalo, calamares y mero en escabeche y en aceite (…) se salaban igualmente anchoas…”. Marinkovich se asoció con Bartolomé Kovacevich para instalar la planta.
Ambos emprendimientos chocaron con las restricciones impuestas por el Gobierno Nacional. Las “autoridades marítimas destacadas en la zona, prohibieron severamente el embarque de conservas producidas por el establecimiento y fundándose en la Ley Nacional sobre la pesca del año 1885, prohibieron la captura de peces fuera del Golfo Nuevo”.
La producción de ‘La Patagonia’, “además de la restricción casi absoluta de la pesca y, por ende, la falta de materia prima para la elaboración de conservas, debe sumarse a aquellas trabas la prohibición (…) del uso de la leyenda Industria Argentina”. Esto obligó a los productores “para la libre venta” a “rotular los productos ‘Pejerrey en aceite. Vigo, España’, ‘Pejerrey en escabeche. Vigo. España’”.
El primer intento regional de industrializar los frutos del mar se había concretado en Ushuaia, en 1890, cuando Luis Fique y Antonio Isorna inauguraron –veintiún años antes que ‘La Primera’- “la empresa Fique & Cia. para envasar mejillones en conserva”, cuya producción “se vendía localmente, en Punta Arenas y Buenos Aires”.
Este emprendimiento “que tuvo una larga historia”, chocó con las dificultades generadas por el aislamiento de la capital fueguina para hacer sostenible su producción. “La rudimentaria tecnología de la época especialmente en el vacío y sellado (con estaño) de las latas trajo algunos inconvenientes” (op.cit.).

Autor : Bernardo Veksler
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