l Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Sur condenó el pasado viernes a Gina Eliana Cárdenas (25) a la pena de prisión perpetua como autora material y penalmente responsable del delito de homicidio agravado por el vínculo, por haber asesinado a su pareja, Alejandro Ramón Báez. Según vecinos y testigos, el 13 de noviembre de 2021 Cárdenas y Báez mantuvieron una fuerte discusión la cual finalizó cuando la mujer apuñaló a Báez en el tórax en un hecho que sucedió en un departamento del Monte Gallinero de la ciudad de Ushuaia.
La lectura del veredicto de parte de los jueces Alejandro Pagano Zavalía, Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy Videla, se dio a conocer pasado el mediodía de este viernes luego que, durante la instancia de últimas palabras, la condenada dijera estar arrepentida.
Asimismo, el Tribunal le revocó el beneficio de libertad condicional del que estaba gozando al momento de la comisión del hecho juzgado y la declaró reincidente por primera vez. Los fundamentos de la sentencia se conocerán el viernes 30 de septiembre, a las 19 horas.
Durante la etapa de alegatos, el fiscal Eduardo Urquiza había pedido una condena de 8 años de prisión para la mujer y unificarle la pena en 10 años, en virtud de la condena anterior, de 5 años que tenía, mientras que el defensor Gustavo Ariznabarreta solicitó la absolución por legítima defensa.
Malestar en asociaciones feministas
Tras el fallo condenatorio, la abogada Indiana Guerreño, presidenta de la Asociación Pensamiento Penal, manifestó su total rechazo y consternación ante el fallo del Tribunal de Juicio en lo Criminal de Ushuaia.
“Estamos consternados y consternadas, estoy recibiendo llamadas de organizaciones jurídicas diciéndome cómo el fiscal pidió 8 años y cómo el tribunal condenó” expresó azorada la letrada.
La Asociación Pensamiento Penal que preside Guerreño, es una organización civil de derechos humanos integrada por profesionales de áreas como psicología, criminalística y derecho, que interviene en causas donde se perciben o sospechan malas prácticas o injusticia manifiesta. Por eso estuvo en Ushuaia durante la última semana presenciando el final del juicio contra Gina Cárdenas.
Pese a que la defensa y las distintas organizaciones excepciones sociales y colectivos feministas encontraban evidente que se trataba de un caso de legítima defensa “de manual” ante la violencia de género que estaba sufriendo, el tribunal integrado por los jueces Alejandro Pagano Zavalía, Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy Videla, le cayeron con la pena máxima a la mujer de 25 años, que al momento del hecho estaba embarazada, en noviembre del año pasado.
“No sé cómo lo va a fundamentar, porque esto excede todas las normas jurídicas. Nuestra Constitución Nacional dice que el titular de la acción penal es el Ministerio público fiscal en representación de la sociedad, quien es el que lleva adelante la acusación. Si la Fiscalía pide ocho años por qué ahora la pena del tribunal” añadió aún sin poder creerlo.
Incluso Guerreño comentó que ya tenía críticas sobre el fiscal por haber pedido ocho años “porque para mí tendría que haber retirado la acusación, el hecho es una legítima defensa. Yo ya tenía muchas críticas al fiscal con ese pedido”.
Ante semejante incongruencia, solo queda esperar los fundamentos, posiblemente esta semana, “para ver cómo hacen para justificar esta extralimitación con respecto al pedido del fiscal, incluso valorando más la violencia pide la mínima de 8 años y el tribunal condena perpetua, hay una diferencia en términos de pena abismal. Esa extralimitación la van a tener que fundamentar muy bien”.
Anticipó que el fallo “va a tener que ser recurrido y si el Superior Tribunal de Tierra del Fuego no toma cartas en el asunto, se llevará a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, lamentablemente, con los tiempos que esto demora”. Guerreño habló de una década como posible tiempo de espera, con Cárdenas presa, pese a que el fallo no estará firme.
