Destacan las nuevas obras cloacales en Río Grande
En el casco viejo

Destacan las nuevas obras cloacales en Río Grande

El titular de Obras Sanitarias municipal señaló que los trabajos remediarán problemas que la ciudad arrastra desde hace más de 30 años. Además mencionó trabajos en pluviales en distintos sectores, gracias al financiamiento nacional.
07/11/2022
E

l director de Obras Sanitarias de la Municipalidad de Río Grande, arquitecto Alberto Ibarra, repasó la actualidad de las principales obras y trabajos que se llevan adelante desde el área que conduce, principalmente relacionadas con el sistema cloacal en distintos sectores de la ciudad.
Ibarra señaló que, en gestiones anteriores a la actual, “no se atendió la parte del casco viejo, donde hay muchas falencias, muchos años sin hacer ningún tipo de inversión”. En cambio, denotó que en la actual administración municipal, el intendente Martín Pérez “tomó la decisión política de atender el sistema cloacal que está colapsado tenía problemas de estancamiento muy seguido, sobre todo en los días de lluvia”.
Los vastos sectores que con frecuencia se anegaban, reflejó, tienen redes antiguas de sección chica, por lo cual fue necesario encarar “una obra de remediación, un troncal bajo la avenida Belgrano hasta la elevadora número 1, son 1200 metros donde se colocó un caño de 300 mm para poder facilitar el escurrimiento de las cloacas. De esa forma se alivian cerca de 10.000 familias en el casco viejo, para que ya no tengan problemas de ese tipo”.
Al respecto dijo que, en virtud de una obra sobre una avenida principal, generó problemas de tránsito vehicular, “se hizo parte con túnel en los cruces, hubo que romper pavimento, una serie de inconvenientes, dado que se trabaja en una parte antigua de la ciudad”. Diferenció que “no es lo mismo que hacer algo nuevo donde uno va urbanizando, en este caso hay que remediar un problema de más de 30 años que no se hacía absolutamente nada”.
El funcionario destacó que las obras quedan bajo tierra y no se ven, “pero hacen al saneamiento y a la mejor calidad de vida de los vecinos”.
Por otro lado, Ibarra mencionó como un logro de gestión el óptimo funcionamiento de la planta depuradora de líquidos cloacales, que atiende a la mayor parte de la ciudad: “Hoy tiene un funcionamiento correcto, está haciendo el trabajo de depuración de los líquidos cloacales en forma óptima. Eso se ha logrado porque se puso un equipo de laboratorio y de profesionales con capacidad técnica para monitorear el funcionamiento de los reactores y que tenga el tratamiento adecuado”. Esto implica, según detalló, que la colonia de bacterias actúe de forma correcta, una población que hay que mantener activa para que hagan el trabajo de saneamiento de los líquidos cloacales.
El financiamiento para estas obras se consiguió a través del Gobierno nacional, ya que “son obras de envergadura o costosas para un presupuesto municipal” según apreció el arquitecto.
También en el casco viejo de la ciudad de Río Grande se están llevando a cabo pluviales –con igual asistencia financiera del Gobierno nacional- “para evitar el anegamiento de las calles 9 de Julio, Thorne, Piedrabuena y también en otros barrios como Chacra 13, que había un problema recurrente de anegamiento que no tenía el escurrimiento de las aguas de lluvia y muchas calles se inundaban”, detalló, así como algunos trabajos en la Margen Sur de colocación de sumideros y troncales de escurrimiento de aguas de lluvia.
Finalmente se refirió Ibarra a la nueva planta de agua, donde se hizo la instalación para el suministro de gas natural, ya que anteriormente se calefaccionaba eléctricamente con el consiguiente problema tratándose de una planta de 2500 m2: “Realmente la gente hacía maravillas para descongelar los piletones de agua. Tuvimos que hacer un tendido de cañería de prácticamente 1800 metros desde la antigua planta El Tropezón”. De tal forma, además de una mejor situación para los trabajadores municipales, se facilita la tarea para evitar cualquier tipo de congelamiento de las piletas que dificulte el tratamiento del agua.
Actualmente la planta está trabajando a menos del 50% de su capacidad, por lo que en tanto la ciudad sigue creciendo, el servicio de agua potable está garantizado: “En toda la ciudad hay muy pocos sectores que no tienen agua, se está trabajando muy fuerte en la urbanización hacia la zona Norte, con la posibilidad de ver la factibilidad del servicio”, indicó por último el arquitecto Alberto Ibarra.

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