E
l secretario de Desarrollo Sustentable y Ambiente de la Provincia, Fabián Boyeras, celebró la decisión de la Municipalidad de Ushuaia de dar marcha atrás con la apelación al fallo judicial que determinó la responsabilidad de la Provincia y la Ciudad en relación a la remediación del daño ambiental producido por la falta de tratamiento de los desechos cloacales.
“Enhorabuena se dio marcha atrás con la apelación a fin de tomar las responsabilidades que nos demanda la ciudad”, sostuvo, y agregó que “uno puede entender el derecho a apelar del Municipio, pero también entendemos el derecho que tenemos todos los que vivimos en esta ciudad de gozar de un ambiente sano, equilibrado y apto para el desarrollo”.
El funcionario indicó que “no tenemos que acostumbrarnos al olor de la Bahía y a que los ríos estén contaminados”, en tanto entendió que “una vez acatado el fallo el Municipio deberá encontrar los mecanismos que sean necesarios para el mantenimiento del sistema cloacal y el saneamiento de las bahías Encerrada y Golondrina, y el turbal de Monte Gallinero.
En ese sentido, entendió que “la implementación de estos mecanismos y acciones no pueden esperar la próxima gestión de gobierno local”, e indicó que “con esto me refiero, por ejemplo, a diferentes vuelcos cloacales que tenemos identificados y que hemos trabajado, en repetidas ocasiones, en la Comisión Interdisciplinaria para el Saneamiento Ambiental de la ciudad de Ushuaia”.
Por otra parte, Boyeras reseñó que la gobernadora Fabiana Ríos “tomó la cuestión ambiental como una política de Estado mucho antes de la denuncia de la ONG Participación Ciudadana (cursada en mayo de 2013), y del reciente fallo judicial”.
Recordó que “el 28 de diciembre de 2011, mediante Decreto 3205, se creó la Comisión Interdisciplinaria para Saneamiento Ambiental de la ciudad de Ushuaia, y una semana después se promulgó la Ley 862 que, entre otras cosas, encarga el Plan Director de Agua Potable y Desagües Cloacales de la ciudad de Ushuaia”.
Además, Boyeras remarcó que el Plan Director “es el producto de la decisión política de la gobernadora, con la planificación y priorización de las obras mayores”, el cual “es acompañado por un plan de remediación Hidroambiental y por 700 millones de pesos destinados a las obras planificadas dentro del Plan Director”.
Por último, resaltó que “esa importante inversión es financiada con recursos provinciales que la gobernadora destinó al saneamiento ambiental y no a obras de mayor visibilidad”.
