a Secretaría de Salud de la Provincia emitió, el pasado 20 de diciembre, la resolución 1395/05 que establece la veda total para la extracción y posterior comercialización para el consumo humano de moluscos bivalvos provenientes de las costas del Canal Beagle.
Cabe señalar que el marisqueo está prohibido en toda época del año, por lo que esta normativa rige especialmente para los pescadores artesanales y acuicultores que se dedican a esta actividad.
José Vargas, técnico que se desempeña en el Laboratorio Regional Ushuaia de Toxinas Marinas, donde se realiza el estudio de la marea roja, comentó que desde el pasado 12 de diciembre se comenzaron a registrar elevados índices de toxinas.
Vargas recordó que hace unas semanas atrás se encontraron imposibilitados de realizar los estudios debido a que el conflicto en Aerolíneas Argentinas impidió la llegada, desde el SENASA de Buenos Aires, de los animales con los que se lleva a cabo el estudio.
Una vez solucionado este problema, comenzaron a realizar los análisis, donde se detectó el incremento en los niveles de toxinas, tanto en las muestras comerciales como en las de clasificación de zonas, que utiliza el Laboratorio de la Subsecretaría de Recursos Naturales como monitoreo constante.
Señaló que los niveles registrados marcan unas 3300 unidades ratón, o, expresado en códigos internacionales, 644 microgramos de saxitoxinas; cuando los valores máximos permitidos para el consumo humano son 400 unidades ratón u 80 microgramos de saxitoxinas.
Aseguró que el monitoreo se realiza en toda la costa del Canal Beagle desde el pasado mes de febrero, porque "se comenzó a trabajar para poder brindarle el apoyo a los acuicultores que tienen la intención de exportar el producto". Aunque señaló que desde hace varios años las muestras se toman de algunos lugares puntuales y estratégicos.
Remarcó que esta tarea se continuará realizando periódicamente porque "la Subsecretaría de Recursos Naturales tiene la obligación de seguir realizando el monitoreo para estudiar cómo se desarrolla el fenómeno", de modo que cuando se registren valores que permitan el consumo de ese producto, se les pueda comunicar a los pescadores y acuicultores para que comiencen con la extracción una vez que se levante la veda.
Finalmente, comentó que estos niveles elevados no sorprendieron ya que es normal que en esta época se registren así, anotando que "históricamente octubre y noviembre son meses clave, porque los niveles comenzaban a subir", acotando que primero se registraban en cholgas, posteriormente en mejillones y luego en las demás especies de moluscos.
