oracio Domínguez, quien conducía el automóvil que atropelló al policía Mario "Pupi" Romero la semana pasada, fue trasladado este viernes en horas de la tarde y alojado en una celda de la delegación local de la Policía Federal, por orden del juez que instruye la causa.
Domínguez denunció en sede judicial además haber sufrido una terrible golpiza, y ante tal situación, se libró una solicitud de las autoridades del Ministerio del Interior para alojar al imputado y así resguardar su seguridad física.
Las gestiones encaradas por el propio jefe de la Policía, comisario general Roberto Barbero, y la flamante subsecretaria de Derechos Humanos, Fabiana Nodar, dieron sus frutos el viernes, cuando se dispuso que fuera trasladado de la alcaidía central hacia las dependencias de la Policía Federal ubicada en Deloqui y Piedrabuena.
Como se recordará, el desgraciado episodio se produjo el domingo 12 de noviembre a las 6.55, sobre la avenida Perito Moreno, entre la Planta Orión y el emplazamiento del local Muelle 55. El accidente ocurrió en circunstancias en que un grupo de efectivos policiales pertenecientes a la División Servicios Especiales Ushuaia se encontraba realizando tareas de prevención orientando y exhortando a los transeúntes a no caminar por la calzada y desplazarse por la vereda ubicada a lo largo y al costado del trazado de la citada avenida. Ante tal circunstancia, uno de los efectivos policiales destacados en el sitio, más precisamente el cabo primero Mario Romero Gutiérrez, fue embestido por un rodado marca Ford, modelo Escort, color negro, sin chapa patente, que circulaba a excesiva velocidad por el sitio, presumiblemente en dirección Sur-Norte.
Tal fue el golpe que el cuerpo del suboficial impactó en el techo de la unidad, destrozando el parabrisas, doblando el parante del techo de la unidad y las chapas del mismo sector.
El tremendo impacto a tan alta velocidad le ocasionó gravísimas lesiones. Inclusive sus compañeros confirmaron que la humanidad de Romero quedó sobre la cinta asfáltica a unos 5 metros del lugar donde se produjo el impacto, en un charco de sangre.
Pese a la gravedad del hecho, sin tener un mínimo de consideración, el conductor huyó del lugar dejando inconsciente al suboficial de policía, gravemente herido.
De inmediato y sin perder tiempo, sus camaradas acudieron al lugar, solicitando el envío urgente de una ambulancia y bomberos.
