esde que Tierra del Fuego lograra el estatus jurídico de provincia, la mayoría de las elecciones gubernativas se definieron en segunda vuelta. En una sola oportunidad la fórmula que ganó en primera vuelta repitió en la segunda. También hubo una única oportunidad en que no fue necesario ir ballottage para conocer el nombre del gobernador.
Los 8 años del MPF
A principios de diciembre de 1991 se realizó en Tierra del Fuego la primera elección de gobernador. En esa oportunidad se presentaron 9 fórmulas, entre las que se destacaban la del Movimiento Popular Fueguino –integrada por José Estabillo y Miguel Castro–, la de Frente Justicialista para la Victoria –Esteban Martínez y Osvaldo Alonso–, y la de la Unión Cívica Radical –Oscar Mazzuchi y Carlos Rubino–.
El resultado de la elección ubicó en primer lugar al MPF con el 45,6% de los votos (121.514 sufragios), en segundo lugar al FreJuVi con el 43,4 % (11.918 voto), en tanto que con un escaso 6,8% (1.866) terminó en tercer lugar la UCR. Al no haber alcanzado la fórmula más votada el 50% más 1 de los votos emitidos para el estamento gobernador, quedó sellada la definición en segunda vuelta.
Veintiocho días después de finalizada la primera vuelta, las fórmulas del MPF y del FreJuVi volvieron a confrontar en las urnas. El primer ballottage de la historia electoral fueguina favoreció por estrechísimo margen al binomio mopofista, que logró el 49,3% de los sufragios contra el 48,2% del FreJuVi.
De esa manera, José Arturo Estabillo se convirtió en el primer gobernador electo de Tierra del Fuego por 291 votos.
La peor derrota del Justicialismo
Transcurrido casi cuatro años desde la primera elección provincial, los fueguinos debimos concurrir a las urnas para definir quién se convertiría en el segundo gobernador ungido por el voto popular.
En septiembre de aquel traumático 1995, José Estabillo y Miguel Castro se presentaron ante el electorado para revalidar títulos. Intentaba frustrar esa posibilidad la fórmula del Justicialismo, que conformaban Mario Daniele y Esteban Martínez.
El comicio del 24 de septiembre culminó con un aplastante triunfo del MPF con el 55,6% de los sufragios (22.046 votos) contra el magro 34,1% (13.501 votos) de los electores que respaldaron al binomio del PJ.
Así, José Estabillo logró convertirse, hasta ahora, en el único gobernador reelecto de la Provincia.
La tercera, la vencida
En junio de 1999 se concretó la tercera elección provincial. En esa oportunidad el MPF estaba inhibido constitucionalmente de postular para un tercer mandato a Estabillo, por lo que éste impulsó como su potencial sucesor a su delfín político, Roque Martinelli.
Desde las huestes justicialistas se acordó dar batalla por la Gobernación con la fórmula integrada por Carlos Manfredotti y Daniel Gallo.
Por su parte, el Frente Cívico y Social –que integraban la UCR y partidos de izquierda– apostaba sus fichas a las figuras de Jorge Colazo y Luis Augsburger para alzarse con el triunfo electoral.
El resultado de la primera vuelta electoral de ese año ubicó con el 37,7% (17.251 votos) como ganadores a los candidatos del Frente Cívico y Social, y en segundo lugar con el 34,7% (15.872 votos) a la fórmula justicialista. Muy lejos, con el de 21,1% (9.633 votos) terminó el MPF, marcando así la primera gran derrota electoral de esa fuerza provincial.
El 4 de julio se llevó adelante el segundo ballottage de la historia electoral fueguina. A diferencia de lo ocurrido 10 días antes, el electorado fueguino favoreció en esta oportunidad a los candidatos del PJ. Por apenas 770 votos a su favor, Carlos Manfredotti consiguió lo que había sido imposible para Esteban Martínez, primero, y para Mario Daniele, después; convertirse en el primer gobernador justicialista de Tierra del Fuego.
El triunfo de Colazo
A mediados de 2002, y en medio de los coletazos de la crisis institucional más grave que vivó el país en las últimas décadas, los fueguinos nos dispusimos a participar de cuarta elección provincial.
Para alcanzar la gobernación el ARI alistó a Fabiana Ríos y Adrián De Antueno; el MPF a Jorge Garramuño y Jorge Chocrón; el Frente de Unidad Provincial a Jorge Colazo y Hugo Cóccaro, en tanto que el Justicialismo buscaba la reelección de la fórmula Manfredotti–Gallo.
La primera vuelta coronó como ganador al binomio del PJ con el 29,5% (14.707 votos) y como segundos a Colazo–Cóccaro con un 26,9% ( 13.437 votos). Lejos de estas dos fórmulas quedaron el MPF con un 18,1% (9.056 votos) y un sorprendente ARI con el 12,8% de los votos (6.387 sufragios).
El ballottage frustró la pretensión reeleccionista de Carlos Manfredotti, ya que el 52,8 % de los votantes (25.783 personas) le dio el triunfo al Frente de Unidad Provincial.
A poco de andar, el frente radical–peronista se desgranó y los enfrentamientos entre Colazo y Cóccaro pasaron a ser moneda corriente. La confrontación culminó con la destitución del gobernador electo, y con Cóccaro al frente del Gobierno fueguino.
Este domingo comenzará a dilucidarse cuánto de realidad tiene el mito urbano que comenzó a construirse en la elección de 2002, y que sostiene que fórmula que pierde en primera vuelta, gana la gobernación en la segunda.
