l próximo sábado, 30 de junio, se conmemorará el 37° aniversario del primer rescate aéreo en la Antártida, para lo cual se debieron transportar dos helicópteros en un avión Hércules C-140, lo que permitió que el operativo se desarrolle con una perfecta sincronización de elementos.
La maniobra se realizó para lograr evacuación y relevo del jefe de la estación científica
Almirante Brown, de la Antártida Argentina, quien presentaba un estado de salud
Delicado.
Con esta acción quedó demostrado el alto grado de eficiencia que posee la Fuerza Aérea en tareas de este tipo, por la notable sincronización del difícil operativo, cumpliéndose todos los pasos a la perfección, sin que se notara una sola alteración en los planes previstos.
En aquel 30 de junio, un avión Hércules C-130 transportó a dos helicópteros Hughes 500 OH-6A hasta la base antártica Marambio, los que partieron hacia la estación científica Almirante Brown, donde aterrizaron a las 14.40, previa escala en la base aérea Teniente Matienzo. Media hora más tarde se concretó el regreso a la base Marambio.
De ese modo, a las 13.47 del 1 de julio, el avión Hércules C-130, de la Fuerza Aérea, partía desde la reconocida base antártica hacia la ciudad de Río Gallegos, con el enfermo, los dos helicópteros, sus tripulaciones y el personal de mantenimiento utilizados en la operación, aterrizando en la ciudad santacruceña sin ninguna novedad.
Así quedó concretada, con pleno éxito, esta compleja operación, que puso una vez más de manifiesto la importancia que tiene la pista de la base Marambio, pues de no contarse con la misma en esta época del año, no hubiere sido posible esta evacuación, con las consecuencias que hubieran podido derivar de esa posibilidad.
