espués de permanecer unos días en el Puerto de Ushuaia, realizando una escala logística, hoy zarpa la corbeta de la Armada Argentina "Guerrico", para continuar con su tarea de patrullado y control del mar en la Zona Económica Exclusiva.
El buque había zarpado el pasado 8 de septiembre desde su apostadero habitual, en la Base Naval de Mar del Plata, con la misión de rastrear la posible incursión de pesqueros ilegales dentro de las 200 millas del Mar Argentino. En el marco de esta tarea arribó a la capital fueguina para reaprovisionarse continuar con su actividad.
El capitán de fragata Miguel González, comandante de la nave, comentó que luego de zarpar de Ushuaia navegarán por los canales fueguinos y luego regresar al límite de la Zona Económica Exclusiva, por donde navegarán hasta fin de septiembre.
"Nuestra tarea es efectuar no solo un monitoreo, es decir ver quienes están pescando, sino además verificar que se cumplan las leyes nacionales en materia de pesca", explicó el marino, acotando que "de esta forma se determina la presencia de pesqueros que se encuentran fuera de las 200 millas y obtener esa información que es útil para ser registrados".
Asimismo, comentó que la tarea de vigilancia la desarrollan, en algunas oportunidades, con el apoyo aérea de la Aviación Naval, acotando que en esas ocasiones "coordinamos el trabajo, de modo que la Aviación Naval detecta concentraciones de barcos y nosotros nos dedicamos a identificarlos y verificar quienes están pescando". Sostuvo que durante la primera etapa de la navegación, "no hemos detectado ningún pesquero infringiendo las leyes nacionales", y anotó que en esta época "tampoco hemos detectado grandes concentraciones de buques pescando fuera de las 200 millas".
La corbeta "ARA Guerrico", que integra la División de Patrullado Marítimo del Área Naval Atlántica, es de origen francés. Construida en los años 70, arribó a la Argentina en 1978. El comandante del buque destacó que cuenta con dos motores que le dan una potencia de 12.000 caballos, y un armamento compuesto de un cañón principal de 100 milímetros, otro de 40 milímetros y ametralladoras de 20 milímetros, que sirven para las tareas de control del mar en caso de que haya un buque que infrinja la legislación vigente.
