as autoridades de Salud anunciaron que el próximo lunes, 29 de septiembre, comenzará la campaña para la eliminación del síndrome de la rubéola congénita y del sarampión, dirigida a todos los varones de 16 a 39 años, que consistirá en la vacunación gratuita de grupos cerrados, y la demanda espontánea en los vacunatorios de los hospitales y centros de salud.
La iniciativa tiene como objetivo cumplir con la meta de eliminación de estas enfermedades, y se pone en marcha en todo el país, después de la amplia campaña de vacunación contra la rubéola en mujeres de entre 15 y 39 años realizada en 2006, que permitió la vacunación del 100% en la provincia.
La aplicación de vacunas se realizará hasta el 30 de noviembre a todos los hombres que cumplan con el requisito de edad, incluidos aquellos que ya hayan recibido la vacuna o padecido la enfermedad. Según se informó, en Tierra del Fuego son 22.589 varones los que se encuentran en esa franja y, por ende, que deben inmunizarse contra la rubéola y el sarampión, contándose ya con las dosis en la provincia.
La responsable del Programa Provincial de Inmunizaciones, Ángeles Morseletto, informó que además de aplicarse la vacuna gratuita en los hospitales y los centros de salud de la provincia "la intención es vacunar en las escuelas, fábricas, en dependencias públicas y en las distintas comunidades cerradas, donde acudirán los enfermeros pertenecientes a las distintas áreas programáticas".
La rubéola es una enfermedad viral que afecta a niños y adultos. Sin embargo, cuando la infección se adquiere en el primer trimestre de un embarazo afecta al 90% de los recién nacidos, produciendo lo que se conoce como Síndrome de Rubéola Congénita (SRC), que puede derivar en malformaciones cardíacas, sordera, cataratas y retardo de crecimiento intrauterino.
Cabe destacar que tanto la rubéola como el sarampión se transmiten por contacto con las personas que se han contagiado por el virus. La vía de transmisión es respiratoria (por la salida del virus en las gotitas de saliva que se producen al hablar, toser o estornudar) o por contacto con los objetos contaminados con las secreciones.
Morseletto indicó que "es una campaña basada en la solidaridad, ya que el síndrome de rubéola congénita afecta al feto, por lo tanto involucra al hombre a ser solidario con las generaciones futuras evitando la circulación del virus y protegiéndolos además del sarampión".
