a audiencia pública por la construcción del nuevo gasoducto submarino en el Estrecho de Magallanes se realizó ayer en Río Grande sin objeción alguna por parte de los presentes. En la jornada se realizó una exposición de los detalles técnicos y los informes de impacto ambiental.
Durante la audiencia se puso en conocimiento de la comunidad sobre los alcances del proyecto, que forma parte del programa de expansión de la capacidad de transporte del sistema de Gasoductos Sur, impulsado por la Secretaría de Energía de la Nación.
Estuvieron presentes el secretario de Desarrollo Sustentable y Ambiente, Nicolás Lucas, de Hidrocarburos, Eduardo D'Andrea, y el subsecretario de Hidrocarburos, Daniel Blázquez. En tanto representó a la firma TGS -adjudicataria de la obra- Florentino Tobares, la ingeniera Adriana Endrigo y el ingeniero Damián Sosa. También asistieron representantes de la Consultora Estudios y Servicios Ambientales SRL.
De acuerdo al informe presentado por la Consultora, luego de los múltiples estudios realizados en el Estrecho de Magallanes "no se detectaron impactos críticos" sobre los ambientes terrestres y marinos, aunque anotaron que "sí habrá modificaciones moderadas y compatibles" por las características de la obra.
Asimismo, la firma a cargo del estudio de impacto ambiental realizará tres auditorías durante el desarrollo de la obra, y una cada tres años luego de finalizada.
Por su parte, la empresa TGS brindó detalles de la modalidad de construcción del nuevo gasoducto, que incluirá la utilización de 5 a 6 barcazas y podría comenzar en febrero de 2009, para concluir en mayo del mismo año, aunque advirtieron que dicho plazo "podría dilatarse".
El tendido y montaje del gasoducto submarino estará a cargo de cinco empresas subcontratistas: SAIPEM; ACERGY; CONDUX y GLOBAL ODEBRECHT. El largo total del gasoducto será de 37,2 kilómetros (el sector submarino es de 35.7 Km) y la longitud de las secciones terrestres será de 1,5 kilómetros, siendo para Tierra del Fuego de 750 metros.
La inversión total a realizar se estima en 200 millones de dólares y la vida útil del gasoducto será de 30 años, transportando 7 MM Stm3/Día de gas.
Desde TGS remarcaron que el montaje del gasoducto estará a cargo de empresas extranjeras especializadas en este tipo de obras, garantizando que los estándares de trabajo apuntan a preservar al máximo el medio ambiente.
