or segundo día consecutivo, el Aeropuerto Internacional de Ushuaia volvió ayer a permanecer cerrado para el arribo de aviones ante la persistencia del problema eléctrico que impide el normal funcionamiento del servicio de radioayudas. Los pasajeros de los 10 vuelos programados para la jornada tuvieron que ser trasladados por vía terrestre hasta la aeroestación de Río Grande, a donde se derivó provisoriamente el arribo de las aeronaves.
Personal de AIUMA y de la Fuerza Aérea continuaba trabajando anoche en la reparación del desperfecto eléctrico que dejó sin asistencia del sistema de radioayudas a los aviones con destino a Ushuaia. Fuentes confiables le informaron a el diario del Fin del Mundo que las tareas podrían concluir para las 6 de hoy. Pese a ello no se informó si el primer vuelo previsto para la jornada -que partirá a las 5 desde Capital Federal- arribará a Ushuaia o sí será derivado al Aeropuerto de Río Grande.
El director Administrativo del Aeropuerto, Luis Guillermo Harbin, informó que la falla en la asistencia del sistema de radioayudas habría sido generada por la humedad presentada en el conector eléctrico subterráneo al (VOR) y al ILS que se ubica a la vera de la pista de aterrizaje.
"Una empresa contratada por la Provincia está realizando el mantenimiento que implica revisar las uniones para eliminar la humedad", indicó el funcionario. En los trabajos que se iniciaron al mediodía de ayer colabora un técnico de la Fuerza Aérea.
En las últimas 48 horas, fueron derivados a Río Grande los pasajeros de 18 vuelos. Ante los inconvenientes, la empresa Aerolíneas Argentinas resolvió realizar el traslado de sus pasajeros en colectivos contratados por la línea aérea.
El caos generalizado en el Aeropuerto se hizo sentir con las numerosas quejas de los usuarios hacia las líneas áreas, que en esta oportunidad no tuvieron responsabilidad alguna en los inconvenientes generados.
Proponen plan de contingencia Reprogramación de vuelos, reservas perdidas, cambio de cronogramas y fastidio en los turistas fueron algunos de los inconvenientes que manifestó Hernán Quesada, vicepresidente de la Asociación Fueguina de Viajes y Turismo (AFUVYT), tras la ruptura del equipo de radioayuda que dejó demorado en la ciudad a un centenar de turistas en los últimos días. |