Se realizaron reparaciones para que pueda navegar seguro hasta un dique seco

El "Ocean Nova" no pudo realizar su último viaje de la temporada a la Antártida

02/03/2009
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esde la Prefectura Ushuaia e Islas del Atlántico Sur señalaron que el buque de pasajeros "Ocean Nova" no pudo realizar su último viaje de la temporada a la Antártida, ya que el incidente que sufrió en Bahía Margarita, frente a la Base San Martín al oeste de la península antártica, le produjo daños que, para realizar otro viaje seguro con pasajeros, deberán ser reparados en un dique seco. En ese sentido, días atrás zarpó rumbo a Dinamarca, donde se le realizarán esos trabajos.
La embarcación había quedado varada a mediados de febrero, cuando buscaba refugio durante una fuerte tormenta que azotaba el sector, y después de trasbordar sus pasajeros al "Clipper Adventurer" pudo zafar por sus propios medios y navegar sin dificultades hasta el Puerto de Ushuaia, donde arribó el fin de semana anterior.
El jefe de la División Operaciones de la Prefectura Ushuaia, prefecto principal René Reibel, señaló que una ves que se tomó conocimiento del incidente, se "inició un expediente en Prefectura por el problema que tuvo en la Antártida", anotando que "en un primer momento, buzos del buque español Hespérides realizaron una serie de inspecciones para ver la posibilidad de que no haya mayor riesgo de navegar a puerto seguro, que el más cercano es Ushuaia, y determinaron que no había ningún tipo de inconvenientes que pusiera en peligro la vida de las personas abordo".
Recordó que los pasajeros pasaron al buque "Clipper Adventurer", que es operado por la misma empresa, y ambos barcos iniciaron la navegación hasta Ushuaia. Así, comentó que la Prefectura tiene "un sistema de supervisión que se llama por el estado rector del puerto, que es a través de un convenio que hay con todos los países latinoamericanos, el cual permite preservar la navegación en los lugares donde tenemos responsabilidad la Prefectura y el Estado Nacional". Mediante ese sistema "se ingresa al buque, se le efectúan las primeras inspecciones y luego se le realiza una inspección más profunda con los buzos de la Prefectura Naval, quienes determinan que los elementos con los cuales el buque tuvo problemas en la Antártida, como es la roca, le produjeron un problema mayor que el que se había pensado en un primer momento, cuando los buzos españoles lo inspeccionaron".
Aclaró que esto se pudo comprobar ya que los elementos y la situación que se tienen en Ushuaia es muy distinta y favorable a la que se tenía en la Antártida; y remarcó que "se determinó que el barco tiene un riesgo mayor para seguir navegando y de inmediato se convocó a quienes le realizan las inspecciones y le permiten la certificación para continuar con la navegación", agregando que a ellos se les explica que la nave en esas condiciones no puede seguir navegando, planteo con el que estuvieron de acuerdo y junto al personal de la Prefectura se evalúan la situación y se decide que lo reparen en el puerto de Ushuaia. Reibel explicó que una vez finalizadas esas tareas, y comprobando que puede volver a navegar, se le habilitará la zarpada, pero "con destino a un dique, porque este buque no puede volver a la Antártida, punto en el que estuvimos todos de acuerdo desde un principio". De este modo, manifestó que las tareas de reparación que se realizaron en la capital fueguina fueron simplemente para garantizar una navegación sin inconvenientes hasta un dique, donde se le deberán efectuar trabajos más profundos de restauración en el casco, que fue el lugar del barco más comprometido porque fue donde se apoyó contra la piedra.