De la Mata advirtió que actores externos ponen en peligro el potencial industrial de la Provincia

15/02/2010
E
s contador público y llegó a la provincia como gerente de una empresa electrónica que se radicó en Río Grande en 2005 y desde hace 2 años ocupa la Secretaría de Promoción Económica y Fiscal del Gobierno arista de Fabiana Ríos. Locuaz, entusiasta, pragmático, declaradamente peronista y con una fuerte tendencia a explicaciones pedagógicas, Fabio de la Mata es una "rara avis" en esta etapa de la vida institucional de la Tierra del Fuego, donde la ley 19.640 parece retomar la fortaleza que tuvo hace unos 20 años atrás. Horas antes de la visita de la ministra de Industria y Turismo de la Nación, Débora Georgi, dialogó cerca de 2 horas con EDFM y habló del presente y del futuro industrial fueguino.

Después de 2 años de gestión frente a la Secretaría Económica y Fiscal del Gobierno provincial, el contador Fabio de la Mata advierte que más allá de los logros obtenidos tras la dura pelea en el Congreso por la modificación de ley 26.539, que permitió nuevas ventajas comparativas para la industria local sobre los productos importados de terceros países, el proyecto de polo tecnológico fueguino posee una serie de enemigos internos, que podrían quitarle el fuerte impulso que le dio Nación el año pasado.
Cuando se lo consulta, no titubea en nombrarlos, "porque es preferible decir la verdad ahora antes de que mañana la realidad nos supere". Por lo que indica que los costos del transporte terrestre, los valores que tiene el Puerto de Ushuaia, las horas extraordinarias de los servicios aduaneros, los precios exorbitantes que las inmobiliarias le ponen a los predios aptos para que las empresas monten sus plantas, entre otros, erosionan las posibilidades concretas de consolidar el desarrollo industrial, para ser ésta parte de la necesaria reconversión de la economía, frente al hecho concreto de que la provincia se encuentra en la etapa final de la explotación hidrocarburífera, donde el horizonte no supera los 20 años.
Por ello se ilusiona en que el Gobierno logre congregar a todas las partes y de esta manera se pueda acordar un plan de desarrollo industrial sustentable en el tiempo, donde sus actores externos no jueguen en contra a las posibilidades concretas que él sostiene "son inmejorables". Aunque no tiene dudas en sostener que en el medio existe "una visión cortoplacista de grupos minúsculos que no tienen otro horizonte que enriquecerse rápidamente, en detrimento de la mayoría y del esfuerzo nacional por consolidar un proyecto genuino", en contrapartida a la actitud que ve en el gremio metalúrgico, de quien resalta haber mostrado una seriedad y una destacada madurez frente a esta posibilidad que brindó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

"Sostener y consolidar las fuentes laborales"

Cuando se lo consulta sobre su estimación en la generación de nuevos puestos de trabajo para el presente año, De la Mata responde: "No es bueno plantar ilusiones. Lo mejor que podemos aspirar es sostener y consolidar las fuentes laborales y trabajar en nuevos procesos productivos". Sin embargo enumera que paralelo al sector industrial una serie de actividades han tomado real envergadura, ligados al transporte del personal, a los servicios de comedor, a la asistencia médica laboral a la indumentaria y a la seguridad industrial. Sin que se le escape la incidencia que tiene el sector electrónico en el crecimiento del comercio –de manera directa en el rubro alimenticio–, como también en la venta de automotores y en el alquiler de inmuebles de manera temporal y permanente. "La provincia tiene fundadas razones para ser el polo tecnológico de la Argentina, pero ello no dependerá solamente del gobierno o de las empresas, sino de la decisión mayoritaria de los actores sociales que la componen", reitera.

Mayor control y participación del Estado provincial
 
Como objetivos para el presente año, el funcionario también tiene en carpeta la incorporación a la Secretaría de contadores e ingenieros que controlen a las empresas, para garantizar que no genere una mala utilización de la ley 19.640 y de las ventajas logradas recientemente.
"Se hace necesario que el Estado Provincial tenga una participación activa, que se involucre de lleno en esta nueva etapa, para que el proyecto no se desvirtúe", afirma. Por lo que más allá de reconocer que es la Secretaría de Industria de la Nación el órgano máximo de aplicación de la Ley, confiesa que peleará por la creación de un organismo intermedio con participación del gobierno fueguino, que no solo sirva para efectuar un mejor seguimiento de los procesos en marcha, sino también que vaya proyectando la incorporación de nuevas líneas de producción para su adecuación tecnológica.