Muerte a mazazos Héctor Nenen, de 56 años, se desempeñaba como sereno de la empresa y, según reveló la autopsia, murió a causa de dos golpes que le propinaron con una maza. El hombre presentaba hundimiento de cráneo de dos centímetros, mostrando un impacto en la zona cervical (nuca) y otro en la región occipital. Las presunciones investigativas indican que el sereno recibió un primer golpe y que ya en el suelo fue rematado con un segundo mazazo que terminó con su vida. No obstante resulta aún una incógnita si los golpes fueron recibidos sin que notase la presencia de su atacante o si tras identificar y advertir la presencia de los mismos, fue llevado al fondo del predio para ser asesinado. Cabe señalar que la policía secuestró dentro del predio una maza en cuyo mango había rastros de sangre con lo que no quedarían dudas de que esa fue el arma homicida. |