Bajo el lema “Nuestros océanos: por un futuro verde”

Se conmemoró el Día Mundial de los Océanos

08/06/2011
A
yer, 8 de junio, se conmemoró el Día Mundial de los Océanos. A partir de la resolución 63/111, del 5 de diciembre de 2008, la Asamblea General decidió que a partir de 2009 las Naciones Unidas designen al 8 de junio de cada año como Día Mundial de los Océanos.
El tema de la conmemoración de este año fue “Nuestros océanos: por un futuro verde”, siendo esta fecha una oportunidad para crear conciencia mundial de los desafíos que enfrenta la comunidad internacional en relación con los océanos.
Según señala el sitio web de Naciones Unidas, la Asamblea General también reconoce la importante contribución del desarrollo sostenible y la gestión de los recursos y los usos de los océanos y los mares, al logro de los objetivos internacionales de desarrollo, incluidos los que figuran en la Declaración del Milenio.
La resolución exhorta a los Estados usuarios y a los Estados ribereños de los estrechos utilizados para la navegación internacional, a que sigan cooperando mediante acuerdos relativos a cuestiones relacionadas con la seguridad de la navegación, incluidas las ayudas para la seguridad de la navegación, y a la prevención, reducción y control de la contaminación procedente de los buques.
Asimismo, exhorta a los Estados a que consideren la posibilidad de hacerse miembros de la Organización Hidrográfica Internacional e insta a todos los Estados a que colaboren con esa organización para aumentar la cobertura de la información hidrográfica a nivel mundial, a fin de reforzar la formación de capacidad y la asistencia técnica y promover la seguridad de la navegación, especialmente en las zonas utilizadas para la navegación internacional, en los puertos y en las zonas marinas vulnerables o protegidas.
El secretario general de la Asamblea de las Naciones Unidas, Ban Ki–moon, sostuvo que “el Día Mundial de los Océanos brinda la oportunidad de reflexionar sobre la importancia de los océanos para el desarrollo sostenible de la humanidad”, remarcando que “constituye asimismo una buena ocasión para reconocer numerosos y graves problemas que afectan a los océanos.

La visión regional

En el Día Mundial de los Océanos, la Fundación Patagonia Natural planteó una serie de reflexiones acerca de nuestro ambiente y la importancia de la protección costera–marina.
En ese sentido, destaca que las aguas jurisdiccionales de la Argentina constituyen el Gran Ecosistema Marino–Costero Patagónico, siendo uno de los grandes ecosistemas costeros de importancia global.
La línea costera de este ecosistema presenta una alta variedad geológica y climática que mantiene una biodiversidad de relevancia global. Este ecosistema marino sostiene grandes poblaciones de aves y mamíferos marinos de importancia mundial que se reproducen en las costas de la Patagonia, las islas del Atlántico Sur, y en zonas distantes tales como la Antártida y Nueva Zelanda. Esto incluye más de 80 especies de aves marinas, unas 50 especies de mamíferos marinos y más de 400 especies de peces. Por ejemplo, mantiene más de la mitad de la población reproductiva del Pingüino de Magallanes, con más de 1 millón de parejas; más del 50% de las 600.000 parejas de Albatros de Ceja Negra; alrededor de 3.000 Ballenas Franca Austral, que representan aproximadamente el 30% de la población mundial.
Influenciada por la corriente fría de Malvinas, que fluye hacia el norte, y en menor medida por la corriente cálida del Brasil que tiene dirección sur, esta zona del océano también mantiene una de las pesquerías comerciales más rentable del mundo, generando un volumen total promedio registrado de aproximadamente 1 millón de toneladas métricas por año desde mediados de los 90.
Muchas especies de aves y mamíferos marinos que se alimentan en este ecosistema y reproducen en las costas de la Argentina, forman enormes colonias en lugares específicos a los que regresan cada año. Estos incluyen una gran colonia de Elefantes Marinos del Sur en la costa de la Península Valdés, la mayor colonia del mundo de Pingüinos de Magallanes en Punta Tombo, y la mayor colonia existente de Pingüinos Penacho Amarillo en Isla de los Estados. Estas zonas costeras son de enorme importancia para la biodiversidad global. Asimismo, son áreas sumamente frágiles que están bajo la amenaza creciente de las actividades humanas poco controladas; y que necesitan de una protección efectiva.
En tal sentido, la Fundación Patagonia Natural está buscando una solución a largo plazo para revertir las amenazas a la biodiversidad costero–marina, mediante la expansión de la protección y la preservación de porciones significativas de su ecosistema costero–marino integrándolo en un Sistema Interjurisdicional de Áreas Protegidas Costero Marinas, usando un enfoque ecosistémico combinado con un manejo responsable de los recursos, con financiamiento adecuado para asegurar su sustentabilidad en el largo plazo.