A
ún cuando el Parlamento todavía no definió la suerte que correrán los 4 proyectos de reforma tributaria, el Poder Ejecutivo resolvió contemplar dentro del proyecto de presupuesto 2013 unos 300 millones de pesos de ingresos, producto de la mayor recaudación impositiva estimada en función de la aplicación de esas iniciativas, de los cuales unos 230 millones se corresponden a la eliminación de tasa cero e incremento del 1,5% sobre la alícuota de Ingresos Brutos; 10 millones por Inmobiliario Rural y unos 60 millones por Impuestos de Sellos, que irían íntegramente a las arcas provinciales de mantenerse firme la decisión política anunciada por los municipios de que no sean coparticipables.
En función de esta determinación, el Ejecutivo estimó que la Administración Central (sin contar la Descentralizada) contará para el próximo año con unos 5.250 millones de ingresos corrientes, de los cuales 1.581 millones de pesos deberá transferir a los Municipios; 125 millones a la Legislatura; 270 millones al Poder Judicial; 53,4 millones al Tribunal de Cuentas y 8,1 millones a Fiscalía de Estado, con lo que le quedarían disponibles para hacer frente a las erogaciones corrientes 3.212 millones de pesos. De ese total, 2.865 millones de pesos están afectados al pago de los salarios del personal dependiente del Poder Ejecutivo, lo que representa el 89% del total de sus ingresos corrientes.
Si la Administración Ríos, adoptando un criterio de prudencia, hubiera elaborado el proyecto de presupuesto sin contemplar los mayores ingresos tributarios derivados de una serie de proyectos que por el momento no son más que eso, el total de ingresos corrientes se ubicaría en torno a los 4.950 millones de pesos. Aplicando sobre esas cifras los 2.037 millones de pesos que debe transferir a Municipios y demás poderes y órganos de contralor, los recursos efectivamente disponibles para el Ejecutivo se ubicarían en torno a los 2.912 millones de pesos, de los cuales 2.865 millones de pesos corresponden a salarios, gasto que representaría entonces una afectación del entonces 98% de los recursos disponibles. De esta manera, el Poder Ejecutivo contaría con un remanente de 47 millones de pesos para hacer frente a los demás gastos cotidianos que devienen del funcionamiento habitual de la Administración Pública Centralizada.
Esto habla a las claras de la imperiosa necesidad de modificar la estructura de ingresos o de gastos de la administración provincial, para garantizar que esta pueda cumplir de manera adecuada, o de mejor forma, con sus obligaciones básicas.
Y al fin la reforma tributaria estaba contemplada
Producto de la errónea lectura de uno de los cuadros que conforman los 129 folios de planillas anexas al proyecto de ley de Presupuesto 2013, en nuestra edición del día de ayer informamos erróneamente que el Ejecutivo no había contemplado dentro de los ingresos corrientes estimados para el próximo año los mayores recursos derivados de la aplicación de la reforma tributaria pretendida por la gestión Ríos, y que aún no tiene fecha cierta de tratamiento en la Legislatura. |
