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a Dirección de Bromatología de la Municipalidad de Ushuaia informó que se estableció la veda para la recolección, comercialización y consumo de moluscos bivalvos por marea roja.
Mediante las pruebas de laboratorio que se realizan semanalmente en la Dirección de Laboratorio Ambiental de la Municipalidad de Ushuaia, se confirmó que las concentraciones de toxinas se encuentran en niveles de riesgo para la salud pública. Por este motivo se establece una veda de extracción y consumo de moluscos en tanto el fenómeno persista.
Cada temporada se registra el fenómeno marino denominado “marea roja” que suele presentarse entre primavera y otoño. Dicha intoxicación es una de las más conocidas, responsable de la llamada marea roja, o intoxicación paralizante por moluscos. La intoxicación se produce por el consumo de moluscos bivalvos como mejillones, berberechos, almejas, ostras, vieiras, cholgas y también por caracoles de mar.
Cabe resaltar que los moluscos que contienen las toxinas no alteran ninguna de sus características físicas como color, olor, tamaño o forma, por lo que en apariencia se ven normales y además soportan muy bien el calor durante la cocción de los alimentos, por lo que las toxinas sólo se pueden detectar a través de una prueba de laboratorio.
La sintomatología de la intoxicación es eminentemente nerviosa ya que afecta tanto al sistema nervioso central como al periférico, comienza con una irritación que semeja un hormigueo en los labios y alrededor de la boca, esta sensación puede extenderse a las piernas, brazos y punta de los dedos y en casos extremos ocasiona la muerte por parálisis respiratoria que sobreviene en forma inmediata.
Recomendaciones de la Dirección de Bromatología
Para evitar intoxicaciones por el fenómeno de la marea roja, desde la Dirección de Bromatología del Municipio informaron sobre las medidas de prevención: No recolectar moluscos y/o mariscos en las playas para el consumo casero; no adquirir preparaciones elaboradas con mariscos (conservas, ensaladas, paellas, etc.) en puestos callejeros o locales que no tengan habilitación bromatológica; no comprar mariscos frescos “al pie del barco”, en escolleras o los que puedan ofrecer pescadores artesanales; comprar y consumir mariscos sólo en pescaderías, restaurantes o locales de comidas debidamente habilitados.
Dado que las toxinas producto de las mareas rojas no se destruyen con el agregado de limón, vinagre o alcohol ni se inactivan con la cocción, lo más seguro es consumir alimentos que cuenten con los análisis sanitarios de organismos oficiales competentes.
