A
compañado por el presidente del Centro de Ex Combatientes de Río Grande, Horacio Chávez, y por el Presidente del Consejo Nacional de Ex Combatientes (dependiente del Ministerio de Interior), Ernesto Alonso; el presidente del Centro de Ex Combatientes de Malvinas de la ciudad de la Plata (CECIM), Mario Volpe, presentó ayer ante el juzgado Federal de Río Grande, una denuncia penal para que se investigue la presunta comisión de delitos de lesa humanidad, perpetrados por las tropas británicas contra soldados argentinos, durante el conflicto bélico de 1982 en las Islas Malvinas.
Esta segunda denuncia, ampliatoria a la efectuada en el 1998 por soldados y suboficiales argentinos, se sustenta tanto en los testimonios de las propias víctimas, como en una serie de libros que fueron publicaron durante la primer década del 2000, por los propios oficiales y suboficiales británicos. Los cuales para el denunciante constituyen una autoincriminación, que permitirá clarificar los hechos cometidos por las tropas británicas, en franca violación a las disposiciones de la Convención Internacional de Ginebra, en lo relativo al debido trato a los prisioneros de guerra.
La denuncia que se presentó ayer ante el juzgado Federal de la ciudad norte de la Tierra del Fuego, fue tomada por la doctora Mariel Borruto –quien subroga hasta abril el cargo de Lilian Herráez de Andino, magistrada titular de ese tribunal Federal–, constituyéndose en un nuevo acto de reafirmación soberana sobre nuestras Malvinas, al ser Río Grande, el juzgado de competencia y de mayor proximidad geográfica, a las islas usurpadas por el imperio británico desde 1833.
Los casos denunciados constituirían hechos criminales, consistentes en la presunta comisión de homicidios en perjuicio de los solados argentinos que fueron tomados prisioneros en los campos de batalla, durante los últimos días de la guerra, mayo–junio de 1982.
En esta investigación, llevada adelante por el CECIM La Plata, se pudieron recopilar varios casos de soldados que fueron ultimados por los británicos en los distintos escenarios donde se libraron los combates más cruentos, como la batalla de Monte Longdon. Allí, uno de los soldados argentinos sobrevivió al fusilamiento, y en otros casos sufrieron mutilaciones tanto muertos como los heridos, que los propios británicos documentan con fotografías y relatos en sus libros; como los ampliamente conocidos; “Viaje al infierno”; “A dos lados del infierno”; “Green Eyed Boys s” y “Al filo de la navaja”, donde aparecen testimonios de las propias fuerzas británicas denunciando estos hechos aberrantes cometidos por propios camaradas, contra los argentinos.
Por el mismo tema y durante la segunda mitad de la década del 90 una delegación de Scotland Yard (la policía Británica) llevo adelante una investigación en Buenos Aires, cuyo objetivo fue tratar de conciliar con las autoridades de aquella época que nada se investigue.
Los hechos denunciados resultan de carácter imprescriptible, conforme lo determina el artículo I, inciso “a” de la “Convención sobre la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y de los crímenes de lesa humanidad”.
En este presente el CECIM La Plata retoma esta investigación confiando en el cambio de paradigma que permite avanzar con Memoria, Verdad, Justicia y Soberanía a los 30 años de la recuperación de la democracia.
