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os problemas edilicios y la falta de terminación de los correspondientes trabajos de refacción y mantenimiento obligaron al Ministerio de Educación a posponer hasta el 5 de marzo el inicio del ciclo lectivo en varias escuelas de Ushuaia, que estaba previsto para hoy.
Durante la tarde de ayer cobró fuerza un rumor sobre la posibilidad de que la postergación alcanzara a la totalidad de los edificios educativos de la ciudad, pero finalmente la medida alcanzó a cuatro: la Escuela N° 15 Centenario de Ushuaia, la 39 Mirador del Olivia, la 31 Juana Manso y la Escuela Especial N° 1 Kayú Chénèn.
En tanto, otros dos establecimientos en los que habrá clases desde el 5 de marzo son la Escuela N° 13 Almirante Brown y la 30 Oshovia. En ambos casos la decisión de postergar el inicio se había tomado con anterioridad en función de la situación particular de ambos.
Estas escuelas compartían edificio desde hace más de 20 años luego de que un incendio destruyera las instalaciones de la Oshovia, y ambas eran de modalidad jornada completa. Finalmente, después de una espera interminable, la 30 cuenta con edificio nuevo. Pero aún no cuenta con el mobiliario correspondiente y la mudanza concluiría en los próximos días.
Cabe mencionar que el Ministerio de Educación había analizado la posibilidad de realizar el acto de inicio del ciclo lectivo 2014 en el nuevo edificio de la 30, obra financiada casi en su totalidad por el Gobierno nacional. El mismo edificio que las autoridades de la cartera educativa habían decidido, el año pasado, destinar provisoriamente para acoger a algunos cursos del Colegio Provincial José Martí, lo que generó una movilización de los padres de la Oshovia en rechazo a esa medida.
En tanto, en la 13 continúa el proceso de adecuación de las instalaciones en función de que la institución –al igual que la 30– retoma la jornada completa.
Ay ministra...
Tras las contundentes afirmaciones de la ministra de Educación, Sandra Molina, sobre que el jueves a más tardar iban a comenzar las clases en la Escuela Especial Kayú Chénèn de Ushuaia, los deseos de la funcionaria dieron contra la realidad.
Es que si bien se había advertido que la reparación de los equipos de calefacción de la escuela iba a demandar al menos una semana –a lo que se debe sumar que luego el trabajo debe ser aprobado por un gasista matriculado y por la empresa Camuzzi–, Molina se había empecinado en ratificar al jueves como día de inicio de las clases.
Ayer, mediante un comunicado de prensa y lejos de la exposición mediática que tuvo las horas precedentes, dio marcha atrás y aceptó lo que marcaba la lógica.
