E
l jefe de Gabinete del Gobierno provincial, Sergio Araque, realizó una declaración testimonial ante el juez Héctor Ochoa en el marco de la causa que investiga el estado del Hospital Regional Río Grande.
Desde el Ejecutivo provincial se consignó que el funcionario entregó al juez numerosa documentación y aportó pruebas que “apuntan a hacer un relato histórico de la génesis de la situación de los hospitales de la provincia, particularmente el Hospital de Río Grande, que fue el motivo de la citación”.
Precisó que “se presentó una copia de la denuncia realizada en marzo del año pasado por el ministro (de Salud) Andrés Arias, a partir de irregularidades detectadas en el Hospital de Ushuaia en aquél momento”, por lo que Arias “había solicitado una auditoría de los dos hospitales al Tribunal de Cuentas”.
Al respecto, Araque presentó al juez “la resolución del Tribunal de Cuentas donde se dispone realizar esta auditoría y los resultados de la misma, que fue efectivamente realizada el 20 de septiembre de 2013 por la contadora Valeria Rolón”.
Dijo que la auditoría “detectó numerosas irregularidades”, y detalló que los resultados del Tribunal luego de trabajar durante meses afirman que “no se puede ser preciso en cuanto a los procedimientos administrativos del hospital porque no se ajustan a la legalidad y están fuera de lo normado; la información no es integral y pertinente respecto a los registros de datos, y estos tampoco se pueden corroborar”, además de que “no se presenta en forma exacta la ejecución de los recursos”.
Araque sostuvo que en base a esto “los vocales del Tribunal de Cuentas intimaron al director del hospital a realizar la rendición de cuentas de 5 millones de pesos en 20 días hábiles”, a lo que sumó que “presenté también la nota por la cual el director solicita una prórroga para presentar la rendición, solicitud que es denegada”, por lo que “a partir de esta situación el Tribunal de Cuentas, hace pocos días, decide iniciar un juicio de cuentas a 12 personas del hospital”.
Respecto al manejo administrativo y contable del hospital, Araque explicó que “por la Ley 554, los hospitales se manejan como una entidad descentralizada con autarquía financiera, es decir, tienen potestad plena para cobrar, ejecutar las órdenes de compra de insumos y rendir los gastos”. Y agregó que “a partir de varios decretos reglamentarios que están vigentes hace más de diez años se buscó agilizar los trámites administrativos, pero encontramos que estas herramientas se utilizaron finalmente de manera desprolija y sin intervención de los órganos de control internos y externos.”
El funcionario dijo que el Gobierno “ha fortalecido los equipos administrativos, ha tomado contadores y ha contratado un sistema integral llamado TEKNE, que es compatible con el sistema SIGA que se utiliza”, lo cual “tiene que ver con unificar el otorgamiento de turnos, las facturaciones, tener un registro de las historias clínicas, unificar cobros de deudas a obras sociales y unificar también las compras y rendiciones, que hasta el momento se hacían de manera precaria con 3 ó 4 procedimientos distintos e inconexos”.
“A partir de las próximas semanas esto ya va a estar en funcionamiento, por lo que creemos que se agilizarán los trámites administrativos al mismo tiempo que se unificará la información, para que tanto la Auditoría Interna como el Tribunal de Cuentas puedan controlar y tener acceso a datos fidedignos acerca de lo que ocurre contablemente en los hospitales”, concluyó.
