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nos 300 estatales afiliados y no afiliados a organizaciones sindicales marcharon ayer en Ushuaia en reclamo de un incremento salarial para la totalidad de los escalafones de la Administración Pública, y en rechazo del ajuste y el congelamiento de los haberes. Además, advirtieron sobre la “preocupante” situación de la salud y la educación públicas reflejada en la falta de personal e insumos y en las carencias edilicias, entre otras particularidades de esas áreas.
Hubo fuertes críticas a la gestión de la gobernadora Fabiana Ríos y a sus funcionarios, en especial el jefe de Gabinete Sergio Araque, por su pasado militante en el Sindicato Unificado de los Trabajadores de la Educación Fueguina que, afirman, contradice su accionar como integrante del Ejecutivo.
Los manifestantes hicieron hincapié en la “desidia” e “inacción” del Ejecutivo provincial, y también apuntaron a la falta de voluntad política para resolver los diferentes frentes de conflicto.
No se salvaron de las críticas los “mediáticos” dirigentes de diversos gremios a los que consideran afines al Gobierno, entre ellos la saliente conducción de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA).
Fue en el marco del paro de actividades que se realizó ayer, impulsado por el Encuentro de Estatales y convocado oficialmente por la nueva conducción de la CTA que encabeza Horacio Catena, y en el que participaron integrantes del SUTEF, de la Asociación Fueguina de Empleados Públicos, del Sindicato de Profesionales de la Salud, los universitarios del Estado provincial, disidentes de ATE, trabajadores precarizados, no afiliados y jubilados de Ushuaia, Río Grande y Tolhuin.
La columna se concentró frente al Hospital Regional de Ushuaia a partir de las 11 y pasado el mediodía marchó hacia el edificio de los bloques de la Legislatura, donde los trabajadores fueron recibidos por el parlamentario Eduardo Barrientos, único legislador presente en el lugar.
Ante el pedido de intervención de la Cámara para buscar una salida al conflicto el representante del PJ remarcó que “el Gobierno tiene la autorización (legislativa) para mover las partidas (presupuestarias) que necesite”, por lo que “ya no necesita de la Legislatura para eso”.
En tanto, indicó que “desde lo político depende de la posición que quiera adoptar cada uno de los legisladores y del grado de involucramiento”, y en ese sentido observó que “no puedo hablar por los 15 legisladores”.
“Cuando hizo falta estuve, y si esto sigue así indudablemente en algún momento habrá que volver a estar”, indicó, pero planteó que “es el Gobierno el que tiene que garantizar el diálogo, yo no puedo llevar al Gobierno a que se siente a negociar”. Incluso, recordó que en el anterior encuentro entre gremios y legisladores “acordamos pedirle a la presidenta del bloque del oficialismo que gestione una audiencia con el Ejecutivo, ella se comprometió a hacerlo y no soy yo quien debe decir si se hace o no”.
Por su parte, Catena alertó que “el conflicto llegó a un punto en el que es importante la intervención efectiva de la Legislatura” ya que “no se puede negar el conflicto que existe con todos los escalafones, que ahora estamos luchando unidos”.
“El Gobierno niega los conflictos pero nos espera con la Casa de Gobierno abarrotada de policías, y mientras tanto en los hospitales faltan insumos y las escuelas no funcionan con normalidad”, fustigó.
Tras el parate en la Legislatura la columna continuó por avenida San Martín hasta la sede gubernamental, donde la esperaban los integrantes de AFEP que desde hace diez días se encuentran encadenados en el lugar ante la falta de respuesta de las autoridades del Ejecutivo.
En un breve acto que tuvo como oradores a referentes de las distintas organizaciones sindicales, se vertieron conceptos como “el paro es en contra del ajuste, no en contra de la gente”.
También se ratificó que a partir de la asunción de las nuevas autoridades de la CTA se inició una nueva etapa, que apunta a lograr “la unidad de todos los trabajadores” para “ver de una vez por todas cómo le torcemos el brazo a este Gobierno”. Esto implica “el inicio e intensificación de un nuevo plan de lucha”.
Rumores y operativo
El martes comenzaron a circular rumores sobre la supuesta posibilidad de una nueva toma de Casa de Gobierno de parte de trabajadores estatales, sin que se especificara a qué sector pertenecerían.
Ayer el Gobierno organizó un fuerte operativo “cerrojo” para proteger los accesos, que incluyó a efectivos de las fuerzas especiales y corte de calle.
Sin embargo, la marcha se desarrolló con total normalidad y sin que se produjeran incidentes de ningún tipo.
Desde el Ejecutivo sostuvieron que fue una medida “preventiva”. El secretario de Seguridad, Daniel Facio, aseveró que “se dio el marco de seguridad correspondiente como en todos los casos donde se realizan manifestaciones en la vía pública”, y por ello “se reforzó la seguridad del edificio para que los trabajadores desarrollen con normalidad sus actividades dentro del edifico gubernamental”.
“Esto no se resuelve cerrando las puertas”
En diálogo con EDFM el secretario general del SUTEF, Raúl Arce, evaluó que el Gobierno “no tiene la fortaleza necesaria” para solucionar el diferendo salarial con los gremios estatales.
Pero también sostuvo que la dirigencia política con aspiraciones electorales da cara a 2015 deberá “salir del ostracismo y tomar una postura” respecto al reclamo de los estatales, “si es que apuntan a ser gobierno en poco tiempo” porque “en algún momento hay que resolver los problemas de la gente”.
El dirigente del sindicato docente dijo que “somos conscientes de que este conflicto se da en un marco de crisis y de compulsa de fuerzas”, y en ese panorama “los trabajadores no somos dóciles y el Gobierno tampoco tiene la fortaleza necesaria pata resolver esto”.
Asimismo, planteó que “evidentemente hay intereses de parte de quienes están ocupando el Ejecutivo y de quienes en otros ámbitos de definición política pretenden en 2015 resolver el futuro de la Provincia”.
A partir de esa lectura consideró que “en algún momento los demás actores deberán salir del ostracismo y tomar una postura si es que apuntan a ser gobierno en poco tiempo, porque en algún momento hay que resolver los problemas de la gente”.
En esa línea, remarcó que “el hospital no puede seguir funcionando sin insumos y cada vez con menos médicos, hay un incremento de los hechos delictivos y eso no se resuelve solo con más policías en las calles, y la educación está en una situación cada vez más complicada por el estado de las escuelas, porque los comedores escolares no funcionan y porque tampoco hay insumos”.
“Esto no se resuelve cerrando las puertas y no atendiendo a los dirigentes, de alguna manera tendrán que tomar una definición a corto plazo”, sentenció.
Consultado sobre los pasos a seguir por el frente de gremios estatales, Arce indicó que “quedará en nosotros que esta primera gran movilización convocada por la nueva conducción de la CTA se intensifique”, aunque valoró que “en nuestro primer día como nueva comisión ya recorrimos Casa de Gobierno, tuvimos asambleas con los compañeros y la idea es ir sumando”.
“Por lo pronto hoy (por ayer) ya demostramos capacidad de unir y de crecimiento, e iremos intensificando las medidas hasta lograr conmover a los que hay que conmover”, concluyó. |
