L
a Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas de Chile (ANFACH) llegó ayer a un acuerdo con el Gobierno de ese país que puso fin al conflicto por el cual se encontraban cerradas las fronteras y que mantenía incomunicada por vía terrestre a Tierra del Fuego con el resto del continente desde hacía 9 días.
El ministro jefe de gabinete del gobierno provincial, Sergio Araque, precisó en la víspera que la suspensión de la medida de fuerza que realizaban los empleados trasandinos desde el miércoles 20 de mayo fue comunicada oficialmente por el canciller argentino Héctor Timerman a la gobernadora Fabiana Ríos.
“El canciller chileno Heraldo Muñoz se comunicó con su par argentino para transmitirle la decisión de la suspensión del paro y a su vez Timerman habló con la Gobernadora”, informó Araque en declaraciones oficiales.
“Quiero destacar que el canciller Timerman estuvo en contacto permanente con Ríos durante el tiempo que duró el conflicto y trabajando personalmente sobre la especial situación de Tierra del Fuego”, agregó el ministro.
El funcionario mencionó que tras el acuerdo con los aduaneros nucleados en la ANFACH, en las próximas horas se normalizará la atención en los pasos fronterizos de San Sebastián, al norte de la isla, y de Integración Austral o Monte Aymond, en el sur de Santa Cruz.
La situación se había complicado en las últimas horas por la presencia de más de 600 camiones varados en Monte Aymond que se encuentran cargados de mercadería para traer a territorio fueguino.
La prolongación del paro de aduaneros generó inconvenientes como la falta de insumos para la industria electrónica y el desabastecimiento de algunos productos, lo que a su vez derivó en protestas de organizaciones sociales, gremiales y políticas de la isla.
Cruce por aguas argentinas
Funcionarios, dirigentes sociales, gremialistas y empresarios de Tierra del Fuego se manifestaron ayer a favor de concretar el proyecto de cruce marítimo entre la provincia y el continente a través de aguas argentinas, de modo de evitar el paso obligado por Chile para transitar desde la jurisdicción fueguina hasta la provincia de Santa Cruz.
El contexto del reclamo conjunto fue el paro por tiempo indeterminado que llevaron a cabo aduaneros chilenos durante nueve días.
El intendente de Río Grande, Gustavo Melella, fue uno de los que se pronunció a favor de avanzar con el cruce marítimo entre la isla y Santa Cruz.
Melella también suscribió ayer un documento conjunto con funcionarios, gremios y cámaras empresariales para ser remitido a la Cancillería argentina, y a la asociación de funcionarios aduaneros de Chile, advirtiendo sobre las consecuencias para la ciudad de la situación que se vivía en las fronteras.
En tanto, el diputado nacional Oscar Martínez bregó por alcanzar una solución “definitiva” para la “incomunicación por vía terrestre de la provincia con el continente”.
Martínez adelantó que acompañará ante organismos nacionales el proyecto de cruce marítimo impulsado por la Federación Popular de Transporte (FePoTra) la entidad con sede en el distrito cuyo fin es motorizar la “integración plena de la isla con la zona continental”.
Por su parte Fabio De la Mata, gerente de New San, la principal empresa electrónica de Ushuaia, afirmó que el cruce por aguas argentinas “permitiría acompañar el desarrollo industrial de la provincia”.
“Es muy difícil consolidarse como un polo industrial y tecnológico del país, si en el medio tenemos que atravesar otro país para regresar a la Argentina. Estamos presos de la situación de tener que pasar por dos aduanas y eso nos somete a imponderables como el actual”, consideró De la Mata.
El gerente industrial también ponderó que el cruce “generaría de por sí un movimiento económico” ya que “a Tierra del Fuego llegan entre 800 y 1000 camiones por mes que ahora le pagan a una transbordadora chilena para cruzar el Estrecho de Magallanes”, precisó.
De la Mata mencionó que el cierre de la frontera con Chile generó que se discontinuaran dos líneas de producción de celulares, a las que podrían seguir “tres o cuatro más”, por lo que “entre 300 y 400 operarios tuvieron que ser reubicados en otras plantas y algunos suspendidos temporariamente”.
El problema que esgrimen las fábricas de la provincia es que, por un lado no llegaban los insumos para producir, y por otro no pueden salir de la isla los productos terminados, con riesgo, incluso, de producir un desabastecimiento de algunos artículos en el mercado nacional.
A su vez, referentes de la FePoTra insistieron en el cumplimiento de la ley nacional N° 26.776, que define como “política de Estado” a “la integración física del territorio continental con su territorio insular de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur”, “entre los puntos operativamente más apropiados en orden a la menor distancia posible” y “a través de buques portarodantes”.
“El cruce por aguas argentinas es también un acto de soberanía. Todos tenemos derecho a transitar por nuestro país sin barreras ni controles migratorios, como dice el artículo 14 de la Constitución. Y ese es el principio que debemos reafirmar los argentinos en este territorio austral”, definió Daniel Guzmán, vocero de la FePoTra.
