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a Federación Popular del Transporte de Tierra del Fuego (Fepotra) con el apoyo de organizaciones gremiales y sociales de la provincia, le solicitó ayer a la gobernadora Rosana Bertone que “ratifique” su “compromiso y apoyo” a la concreción del cruce por aguas argentinas entre la isla y la zona continental del país, para evitar el paso obligatorio por Chile a quienes se movilizan por vía terrestre entre el distrito fueguino y la provincia de Santa Cruz.
La Fepotra, una entidad que brega por esa conexión marítima desde el año 2012, emitió un comunicado en el que alude a la posibilidad de que tanto el gobierno Nacional como el Provincial, abandonen la idea de construir instalaciones portuarias y embarcaciones para realizar el cruce, y se vuelquen al proyecto de edificar un puente en territorio chileno, pero con el apoyo conjunto de ambos países.
La organización advirtió que la obra de infraestructura se llevaría a cabo en Bahía Azul, el mismo sitio del Estrecho de Magallanes actualmente utilizado para efectuar el cruce en barcazas de una empresa privada.
También señaló que la iniciativa ya estaría en conocimiento de Bertone, y de la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner.
La Fepotra solicita el cumplimiento de la ley nacional 26.776, que estableció como política de Estado a la integración marítima entre Tierra del Fuego y el Continente, y avala que el cruce no solo solucione la situación de aislamiento, sino que sirva para desarrollar un polo económico con base en el “intenso transporte de mercaderías” y para que Argentina establezca un “control estratégico en la boca oriental del Estrecho de Magallanes”.
Bertone se pronunció sobre el tema en la campaña electoral del año pasado, al suscribir un compromiso con el ex candidato presidencial Daniel Scioli, en el que prometió “apoyar la aplicación efectiva de la ley 26.776 de cruce por aguas argentinas a través de buques portarodantes”.
Por eso la Fepotra requirió ahora que la mandataria “ratifique públicamente lo que firmó el 31 de mayo”, junto con otros candidatos y referentes políticos provinciales.
“Bertone sabe que estamos al tanto y preocupados por esta situación. Así se lo transmitimos a su ministro de Industria, Ramiro Caballero, el miércoles 20 de enero durante un extenso encuentro”, señala el pronunciamiento de la entidad, y advierte que luego de esa reunión ya no hubo comunicación con los funcionarios.
Sin embargo, la gobernadora fue consultada ayer sobre el tema y negó tener conocimiento sobre un proyecto binacional con Chile para construir el puente, y advirtió que cualquier iniciativa será discutida con todos los sectores sociales de la provincia y con funcionarios del Gobierno Nacional.
“Nadie nos podrá acusar de no haber planteado previa, adecuada y oficialmente nuestra preocupación sobre el tema al gobierno provincial”, insistió, de todos modos, la organización que apoyan desde ex combatientes de Malvinas hasta sindicatos estatales y privados, movimientos barriales y docentes.
Más definiciones
El comunicado de la Fepotra incluyó también otras definiciones, entre las que se destacan las siguientes:
-“interpretamos que de manera solapada, se intenta limitar, frenar o desalentar completamente, el proyecto de un cruce soberano por aguas argentinas y en consecuencia, la imposibilidad de concretar una vinculación por jurisdicción propia y sin fronteras”.
-“frente a la velocidad con que se mueve la gestión de gobierno del presidente Mauricio Macri, es bueno y prudente pedirle a la gobernadora de Tierra del Fuego, ratifique públicamente lo que firmó el 31 de mayo pasado junto al candidato a presidente por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli y al cual adhirieron con su presencia y apoyo, los hoy intendentes, Walter Vuoto, Gustavo Melella y Claudio Queno”.
-“No vaya a ser cosa que una mañana nos desayunemos con que los gobiernos de Argentina y Chile anuncien, con inocencia angelical, “el proyecto de un puente en el Estrecho de Magallanes”, y que posteriormente aparezcan los mismos que hoy monopolizan nuestra comunicación y transporte terrestre, interesados en su construcción y dispuestos a “correr el riesgo empresarial”, conociendo al detalle y mejor que el propio Estado Nacional, la fortaleza de nuestra economía, lo que entra y lo que sale, lo que comemos, lo que producimos, el potencial turístico y hasta la plata que nos pueden sacar; como para proyectar con exactitud sus inversiones, y quedarse de por vida, quizás “por los siglos de los siglos”; con una renta vitalicia monumental”.
