l Director del Hospital de Río Grande, Raúl Domínguez, renunció a su cargo contrariado por las complicaciones que la medida de fuerza de los estatales generaba a su gestión.
Como humorada podría decirse que el farmacéutico, tal la profesión de Domínguez, no dió con el remedio adecuado para la situación que le tocó enfrentar. En una de esas si le pedía consejo a una colega, que también supo tener responsabilidad de gestión, hubiera dado en el clavo. ¿No le parece?