uevamente la actividad náutica estuvo en competencia. La misma pasó por la vecina ciudad chilena de Puerto Williams donde estuvieron en línea de largada los veleros locales: Uspachun, Morena y Snipe, a los que se sumaron el Bruma 2, Matilda, Trinidad II, Vikingo y Wulaia de la Asociación Fueguina de Actividades Subacuáticas y Náuticas de nuestra ciudad y el Irene portando el estandarte de la Armada Argentina.
Si bien Williams no está tan lejos, las tripulaciones decidieron emprender viaje hacia aquella localidad el viernes y estar para todos los eventos que se realizarían al día siguiente y también de la competencia del domingo. Esto aprovechando que tanto el alojamiento como la comida para las tripulaciones Argentinas fueron totalmente sin cargo, provistas por la Armada de Chile. El único que faltó en ese periplo fue el Trinidad II que zarpó el sábado.
Por la mañana del domingo la regata estuvo al borde de la suspensión debido al el intenso viento constante que promediaba los 25 nudos con rachas de 35, traducido: de 46 a 65 kilómetros por hora.
Finalmente se ponía en marcha la competencia, aproximadamente a las 11 hora de Chile, pero con esos vientos las cosas se ponen al rojo, lo que se dice muy picante para una regata con mucha adrenalina y al borde de las roturas de todo tipo, que exige estar atento al máximo en las maniobras.
El recorrido fue un triángulo más una pierna de la siguiente forma: largada entre boya cercana al muelle militar de Puerto Williams y lancha de comisión, luego virar por babor boya situada en cercanías de Punta Truco hacia el este de Williams, luego virar una boya cercana a Punta Gusano hacia el Norte de la cuidad. Virar la primera boya de largada por babor, nuevamente la boya de Punta Truco por babor y llegada en muelle militar. Aproximadamente 10 millas en total.
Finalmente esta prueba náutica la ganaba el Murena de la Armada Chilena seguido por el Irene de la Argentina y el Snipe, también de los representantes locales. El Premio al Espíritu Deportivo quedó en manos de la tripulación de Trinidad II (AFASyN).
Tras la contienda, a última hora de la tarde, se realizó un lunch en el Casino de Oficiales y se concretó la entrega de premios. Posteriormente los barcos argentinos comenzaron el regreso a partir de las 23 del domingo paulatinamente llegando el último a Ushuaia a las 14.
