l juez penal de Río Grande, Andrés Leonelli, indagará hoy a Aldo Javier Nuñez, de 33 años, el principal y único sospechoso de haber asesinado y descuartizado a su ex pareja de 25 años y embarazada de 5 meses, en un hecho que conmocionó al municipio de Tolhuin.
Nuñez, detenido e incomunicado desde el sábado, fue trasladado a Río Grande por temor a una pueblada, ya que el crimen detonó una serie de manifestaciones callejeras en cada uno de los centros poblados de la provincia.
Fuentes policiales confirmaron que el sujeto fue apresado luego del allanamiento ordenado por la Justicia en la vivienda de Nilda Mabel Nuñez, quien se encontraba desaparecida desde el 20 de junio.
Una amiga de la víctima había radicado una denuncia de búsqueda de paradero, y había proporcionado el dato de que en la casa de la mujer, ubicada en la calle Pedro Oliva 947 de Tolhuin, se encontraba su ex pareja al cuidado de dos chicos de 1 y 5 años de edad, uno hijo biológico de ambos y otro fruto de una relación anterior de la mujer.
El hombre había sido citado a declarar por la policía y había brindado explicaciones confusas sobre el paradero de la joven, e inclusive se había mostrado, según las fuentes, “despreocupado por la situación”.
En ese contexto, la Policía allanó el domicilio y tras una breve pesquisa encontró “la pierna izquierda de una mujer seccionada del resto del cuerpo y envuelta en una sábana, escondida debajo de una cama”.
Un operativo posterior en las inmediaciones de la casa, permitió encontrar detrás de un turbal, próximo al barrio “Los Naranjos”, una valija “donde estaban las otras partes del cuerpo”, reveló el comisario de la policía Dino Manetti, en conferencia de prensa.
A su vez, la autopsia sobre los restos humanos fue realizada anoche por peritos judiciales de Río Grande aunque no trascendieron todavía las conclusiones a las que habría arribado el estudio.
Partes del documento de identidad de la mujer y prendas de vestir con sangre también fueron hallados en el interior de la vivienda.
Con la detención del sujeto, los menores de edad quedaron al cuidado de una familia sustituta mientras se sustancia la investigación, indicaron las autoridades fueguinas.
Una imagen con el rostro del acusado fue publicada en las últimas horas por el portal de noticias Aire Libre de Río Grande, y de inmediato se viralizó a través de las redes sociales.
Por su parte, distintas organizaciones vinculadas al colectivo social “Ni una menos” de Tierra del Fuego se nuclearon de forma espontánea ayer y realizaron manifestaciones de protesta en Río Grande, Ushuaia y Tolhuin.
Al grito de “Ni una menos, vivas las queremos”, y exhibiendo carteles alusivos, los manifestantes exigieron “justicia por la muerte de Nilda” y políticas estatales más activas en materia de violencia de género.
La Policía confirmó que la víctima del femicidio había radicado hace un año varias denuncias por violencia doméstica que dieron origen a una orden judicial de exclusión y prohibición de acercamiento contra su ex pareja, por el término de 60 días, dictada por un Juzgado de Familia de Río Grande.
El sujeto violó esa prohibición e ingresó por la fuerza a la vivienda el año pasado, dando lugar a que los efectivos policiales lo detuvieran y que un juez le impusiera reglas de conducta que venía cumpliendo hasta la fecha del homicidio.
Fuentes judiciales señalaron que el hombre “hacía varios meses que se había ausentado y ya no molestaba a su ex pareja”, hasta que sobrevino el inesperado desenlace.
La mujer había logrado contención por parte de una iglesia local, y las autoridades le habían proporcionado asistencia médica para ella y sus hijos, y un Plan de Entrenamiento Laboral (PEL) para garantizarle ingresos mínimos, informaron también las fuentes consultadas por EDFM.
