a primera reunión de análisis legislativo del proyecto de presupuesto 2017 sirvió para que el Ministro de Economía, el Secretario de Presupuesto y el titular de la AREF brindarán un pormenorizado detalle sobre el estado actual de la finanzas provinciales y sobre las estimaciones para el año entrante, en función de las variables macro económicas planteadas por el Gobierno nacional para el año entrante.
De acuerdo a los datos aportados, al 30 de septiembre el déficit de las cuentas públicas rondaba los 800 millones de pesos, estimándose que para el cierre del presente ejercicio el rojo se ubicará en torno a los 600 millones, ello siempre y cuando Nación cumpla con la remisión total de los 600 millones de pesos comprometidos, de los que hasta ahora remesó únicamente 200 millones.
Labroca recordó que al momento de asumir la gestión Bertone, la Provincia presentaba un déficit de
1200 millones de pesos, que se incrementó en otros 600 producto del aumento de 2500 pesos -suma fija- para el personal de la Administración Central, como lo que el rojo trepó a los 1800 millones de pesos. Precisó que en función de la mejora experimentada en materia de recaudación por parte de la AREF, ese desequilibrio se redujo, pero no pudo ser corregido del todo ya que las trasferencias pro coparticipación nacional estuvieron por debajo de la inflación.
Ante ese marco de situación, Labroca dijo que resulta impensable plantear una recomposición salarial para los que resta del año. Es más, al igual que ya fuera señalado por la Gobernadora, dijo que si Nación no transfiere los 400 millones comprometidos, se verá seriamente complicado le pago de salarios de noviembre como así también el medio aguinaldo.
En cuanto a las proyecciones para el próximo año, se indicó que mucho dependerá de cómo se vayan cumpliendo las previsiones que en materia de crecimiento de la economía y reducción de la inflación se planteó como metas el Gobierno nacional. Marcos Fin, Secretario de Presupuesto, se mostró un tanto pesimista al respecto, ya que interpretó que las proyecciones planteadas por Nación resultan bastante optimista.
En el plano provincial, Labroca adelantó que el déficit corriente para el próximo año fue estimado en unos 1.300 millones de pesos, que en función de la inversión en obra pública podría ascender a unos 3.700 millones de pesos. En cuanto a la pauta salarial para el 2017, se mostró cauto y dijo que hoy habrá una reunión en el CFI entre funcionarios nacionales y de todas las Provincias para acordar posiciones en torno a la ley de responsabilidad fiscal. Anunció que por en conversaciones previas, Nación planteó que su pretensión es que ninguna Provincia disponga aumentos salariales que superen el 17%, bajo pena de ver restringida la financiación de obra pública.
Durante la reunión quedó planteado que Economía remitirá una modificación al proyecto original, ingresado a fines de agosto, en función de lo que surja del debate que se está dando en la Cámara de Diputados sobre el presupuesto nacional.
Por su parte, el titular de la AREF, Luis María Capellano, señaló que a septiembre la recaudación acumulada (3.659 millones) superó casi en 200 millones pesos la prevista a comienzos de año, y que se estima cerrar el 2016 con unos 4.962 millones de pesos.
Destacó que la mejora en los procesos de fiscalización y control de los contribuyentes, sumado ello al régimen de regularización de deudas tributarias, permitió que la recaudación -además de tener un comportamiento más estable- experimentará un crecimiento interanual del 41%, un 4% por encima del indice de inflación anualizada que fue de casi un 37%. Dijo que como contrapartida, la coparticipación federal creció un 28%, es decir casi 8 puntos por debajo de la pauta inflacionaria.
En el encuentro, que se prolongó por unas 3 horas, los funcionarios gubernamentales señalaron que producto de de las decisiones adoptadas por Nación en materia de retenciones, impuesto a las ganancias e IVA la Provincia resignó unos 500 millones de pesos, y que para compensar ese impacto en las cuentas públicas desde la AREF se pondrá en marcha un estricto plan de fiscalización sobre hoteles, empresas de la construcción, inmobiliarias y fideicomisos inmobiliarios, ya que la pretensión es alcanzar durante 2017 una recaudación que ronde los 6.200 millones de pesos.
Los pocos representantes de la oposición que participaron de la reunión de ayer -la mopofista Mónica Urquiza y los radicales Pablo Blanco y Liliana Martínez- se mostraron satisfechos con la exposición, pero prefirieron no dar mayores precisiones hasta tanto puedan analizar la información que les fuera aportada ayer.
Para hoy fueron convocados los Ministros de Educación, de Gobierno y los Secretarios de Seguridad y General.
