ue muchas calles de Ushuaia se anegan cada vez que caen unas cuantas gotas de lluvia no es ninguna novedad, pero lo que constituye un misterio -casi comparable con el del Triángulo de las Bermudas- es el charco que mágicamente aparece de manera esporádica y sin motivo aparente frente al Banco Nación de Ushuaia.
Las consultas efectuadas a Ingenieros de confianza obtuvieron como respuesta un: “mirá vos, que cosa extraña... parece cosa e' mandinga”. Otros aventuraron que era una señal de que esa entidad, como el Gobierno Nacional, “está haciendo agua”.
Tal vez la nueva Secretaria de Planificación e Inversión Pública de la Muni, Gabriela Muniz Siccardi, pueda descifrar y resolver el enigma.