rganizada por la Institución Ferial de Madrid (IFEMA), la Feria Internacional de Turismo tuvo su cita anual. La 37ª edición se desarrolló en la ciudad capital española entre el 18 y 22 de enero pasado. Consolidada como la primera gran cita de la industria turística mundial, la edición 2017 batió nuevos récords de participación y de negocio. Según las primeras estimaciones el evento concitó la atención de algo más de 245.000 participantes, con aproximadamente 9.672 empresas participantes de 165 países, y algo más de 7.400 periodistas acreditados de 49 países, estimándose además que para el turismo de negocios en Madrid, el impacto económico superará los 240 millones de euros.
Lo contado hasta aquí podría ser la sucinta crónica de un evento que, más allá del interés de quienes participan de la actividad, nada aportaría al interés general, pero al menos dos situaciones particulares hacen que la noticia tome otra dimensión, para nuestro país en general y para nuestra ciudad en particular.
Dentro del desarrollo estratégico que Argentina ha venido desarrollando en materia turística, apuntando a posicionarse de la mejor forma en el mercado mundial, una idea ha venido ganando espacio y comenzado a dar frutos: promocionar la marca país a través de la revalorización de la identidad de la cocina argentina y lograr su posicionamiento en el plano nacional e internacional.
Con ese objetivo desde el Ministerio de Turismo de la Nación se ha desarrollado de la mano de la Lic. María Ángeles Samamé, el Plan Estratégico de Turismo Gastronómico CocinAR, que según explica el ministro de Turismo de la Nación, Gustavo Santos, "es un plan transversal, que hemos llevado cabo junto con el Ministerio de Cultura de la Nación, que tiene por objetivo revalorizar la identidad de la cocina argentina y lograr su posicionamiento en el plano nacional e internacional recuperando los valores de nuestra cultura gastronómica".
Cabe mencionar que este plan contempla al país entero, integrando a todos los argentinos en esta cadena de valor y dinamizando las economías regionales a través de sus productores, cocineros, chefs, escuelas, mercados y restaurantes.
Así las cosas, llega entonces el primer dato distintivo de lo que fue esta edición.
El creciente reconocimiento internacional de FITUR 2017 se ha visto subrayado por su elección por parte de la Organización Mundial del Turismo como sede de la inauguración del Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, declarado por la Organización de Naciones Unidas, afianzando su posicionamiento entre los eventos más relevantes dentro del ranking internacional, y en particular, para el mercado iberoamericano, dentro del cual este año ha cobrado especial relevancia la presencia de Argentina, como socio principal de FITUR, que ha cerrado su participación con unos resultados muy positivos en promoción internacional y acuerdos comerciales.
El segundo dato destacado de esta edición, que se transforma en uno de interés para nuestra provincia en general y Ushuaia en particular, lo constituye la participación del cocinero local, Lino Gomez Adillon, propietario del Restaurante Volver, como integrante del equipo CocinAR, en representación de la Región Patagonia.
Invitado por Willie Paats – miembro del Consejo Directivo de la Cámara Argentina de Turismo y responsable de la Comisión de Turismo Nacional- Lino Gomez Adillon se sumó al equipo de cocineros patagónicos acompañanado a Pablo Soto de Chubut y Federico Dominguez de Rio Negro.
Durante todo el evento, el equipo de cocineros argentinos trabajó en bloque elaborando los productos y presentando los platos que representaron las distintas regiones de Argentina.
Segunda cita: Madrid Fusión
Desde que se inaugurara en el año 2003, Madrid Fusión se ha convertido en referente de la alta gastronomía mundial.
Y es que este evento no sólo reúne los productos de las principales marcas de alimentación y bebidas de todo el mundo, sino también las propuestas de restaurantes y chefs de prestigio internacional.
Propuestas que llegan al profesional de la restaurantería en forma de ponencias, catas y demostraciones culinarias.
Con el tiempo justo como para tomar un poco de aire, acomodar el cuerpo y aún con las ollas tibias, el equipo de CocinAR enfrentó un nuevo desafío, la XVI Edición de la Cumbre Internacional Madrid Fusión. Este evento se desarrolló entre el 23 y 25 de enero pasados convirtiendo a la capital de España en la capital del mundo de la gastronomía durante tres días. La participación de ponentes internacionales procedentes de todo el mundo, certifica la calidad del mismo.
Cada año un país ejerce de invitado gastronómico y para esta edición tal distinción recayó en nuestro país. Argentina plasmó a través de la presentación de su gastronomía la riqueza que significa el crisol de culturas que la conforma, todo ello merced a la enorme tarea desarrollada por el equipo de CocinAR.
“Madrid Fusión fue el escenario perfecto para proyectar al mundo la cocina argentina, las costumbres, los valores, la pasión, la técnica y la diversidad de nuestros productos que están incluidos en el nuestro Plan CocinAR”, señaló el ministro de Turismo de la Nación, Gustavo Santos.
El evento contado en primera persona
Ya recuperado del periplo desarrollado a largo de nueve días de intenso trabajo, a lo que no se puede dejar de sumar la cuota extra de stress que significa compartir escenario con los referentes de la gastronomía nacional e internacional en semejante marco, ubicado ahora en la “tranquilidad” de la cocina de su “Volver” Lino nos relata en primera persona las vivencias de semejante práctica.
“Sin duda, desde principio a fin fue una experiencia sumamente enriquecedora. Desde el mismo momento en que fui convocado a participar la idea fue representar a nuestra región y a Tierra del Fuego, mostrando todo el potencial que la calidad de nuestros productos conlleva.
Había un programa establecido, pero por mi cuenta y riesgo decidí jugarme la posibilidad de llevar mi propio producto. La experiencia de haber participado en otro tipo de instancias en las que tuve que viajar al exterior con productos frescos, me dio alguna ventaja. Ya sabía como armar mis heladeras, acondicionar y certificar la calidad de lo que allí llevaba, Pero siempre existe el riego de que alguna cuestión burocrática, especialmente si de alimentos frescos se trata, te impida el ingreso de estos a otro país. Afortunadamente todo funcionó muy bien, y pude llegar a Madrid con mis acompañantes de lujo, centollas fueguinas, callos de vieiras y postas de merluza negra, listas para vestirse para la ocasión”.
Lino nos cuenta que resulta impresionante observar cómo la industria de la gastronomía ha descubierto en el público común, ese que conforma el creciente segmento “Chef hogareñ@s”, un nicho de mercado al que día a día le ofrece, a escala, los mismos insumos, técnicas y equipamiento que al mercado profesional. La oferta es sumamente amplia y en cualquier supermercado importante de Europa podés conseguir lo que se te ocurra, con el sabor a lo que se te ocurra. Es muy divertido, acota.
Claro que ese ‘ventaja’ es precisamente el aspecto que constituye una de las principales fortalezas de nuestra gastronomía. Afortunadamente nosotros todavía tenemos la invalorable posibilidad de acceder a producto genuino. De disfrutar del verdadero sabor de algo. En definitiva, de poder tener la invalorable experiencia de acceder a lo que denomino ‘comida sin maquillaje’”.
Durante las degustaciones que realizó en el stand de Argentina durante la FITUR, Lino nos relata que le pedía al público participante que introdujera el bocado en su boca y que, antes de masticarlo no imaginara ningún sabor, no referenciara a ninguna otra sensación, no oliera ningún humo aromatizado y que simplemente mordiera y descubriera el verdadero sabor y suavidad de la centolla, la dulzura natural de la vieira o la untuosidad de la merluza negra.
“Realmente el nivel de aceptación y de satisfacción del público generó mucho impacto” nos asegura.
Y claro, no deja pasar la oportunidad de remarcar, como lo viene haciendo desde hace mucho tiempo, la importancia que desde las esferas gubernamentales pertinentes, sea provincial y municipal, se actúe en el sentido de mantener y cuidar la sustentabilidad del recurso.
Lino no oculta el orgullo y la alegría de haber sido partícipe de estos dos eventos y destaca el grupo humano que integró el equipo de CocinAR.
“Desde lo profesional y lo personal fue muy importante haber participado de la FITUR 2017 y de Madrid Fusión. Fue un verdadero éxito y el trabajo desarrollado entre todos hizo que en cada presentación se lucieran los productos y los cocineros argentinos. Para los que amamos la cocina, esta fue una experiencia inigualable.
Lino nos referencia que en todos los eventos en los que participaron el nivel de exigencia fue alto. “Con el equipo de CocinAR actuamos en la elaboración del agasajo que el ministerio de Turismo de Argentina brindó a las delegaciones participantes de la FITUR, que tuvo lugar en el teatro El Principito y fue un servicio completo para 500 personas. También tuvimos la responsabilidad de llevar adelante el desarrollo de la cena que el embajador argentino en España, Ramón Puerta, ofreció en la residencia de la Embajada Argentina para 180 personas. Todo fue muy adrenalínico, pero sin duda el premio mayor se lo llevó la participación en “Los fuegos de Mallmann”, asegura al referirse al evento que tuvo lugar en la Plaza Mayor de Madrid, desarrollado en el marco de los festejos por el 400º aniversario de su creación.
Claro que la presencia de nuestro protagonista de hoy, siempre lleva implícito un plus de originalidad. ¿A cuánto participante de FITUR o Madrid Fusión se lo podía ocurrir participar del evento acompañado por una mascota? Sólo a Lino, así que una mención especial tuvo la participación del entrañable personaje del “Pingüino callejero”, que acompaño a Lino durante el periplo y regaló toda su simpatía sea en las calles de Madrid como de Barcelona. En esta oportunidad fue Gustavo Vargas, un fueguino por adopción que reside desde hace varios años en España, el encargado de darle vida.
Con la satisfacción dibujada en el rostro, Lino cierra la nota reflexionando que “sin duda ha resultado una experiencia absolutamente fascinante e inolvidable. Ojalá nuestro país, o mejor dicho nuestra región, en un futuro no muy lejano pudiera replicar algo semejante”, y saboreando un buen Malbec, chocamos las copas brindando tanto por lo realizado por él y sus colegas, como por la posibilidad de concretar el anhelo del evento en tierras fueguinas.
