Envíe esta nota por email

a gobernadora Rosana Bertone inauguró ayer el 34º período de sesiones ordinarias de la Legislatura provincial, con un discurso en el que afirmó que “Tierra del Fuego tiene un rumbo”, y en el que envió mensajes políticos al Gobierno nacional, a los intendentes, a los dirigentes opositores y a los gremios estatales que pugnan por aumentos salariales.
Bertone realizó una exposición de una hora y cuarenta minutos en la que repasó las principales políticas de su gestión en el último año, con hincapié en la crisis de la industria, el IPAUSS, la reorganización del Estado y las inversiones en materia de obra pública y de infraestructura.
“Se puede tener buen tiempo y no llegar a ningún puerto. Y también podemos tener la corriente en contra y las peores tormentas y llegar a destino. Tierra del Fuego tiene un rumbo y por eso no me asustan ni las tormentas ni los vientos en contra”, enfatizó la gobernadora en la parte final de su alocución ante la asamblea legislativa.
En el plano político, Bertone convocó a los intendentes a “trabajar juntos”, y evaluó que “no podemos vivir peleando, pero tampoco callando”, y los desafió a “dialogar sin proscribir ningún tema, para poner sobre la mesa los problemas de la gente”.
“Tierra del Fuego no puede tener otra década en que se guarde la basura debajo de la alfombra. Tenemos una oportunidad histórica y no tenemos derecho a desaprovecharla”, expresó en clara alusión a las diferencias que mantiene la gestión de gobierno con las de los intendentes Gustavo Melella (de Río Grande) y Walter Vuoto (de Ushuaia).
Por otro lado, aludió a los gremios estatales (algunos de los cuales se manifestaban frente al recinto legislativo) al señalar que “soy una defensora del dialogo pero no de los aprietes. Soy intransigente ante la coacción y no les tengo miedo. No al apriete, y si al dialogo con la Constitución en la mano”, aseveró la titular del Ejecutivo en otra parte de su discurso, y les recordó que hará el mayor esfuerzo para recomponer sueldos, aunque les advirtió que “no hay peor sueldo que el que no se puede pagar”.
A su vez, criticó a algunos dirigentes políticos (incluso de su propio partido) por no generar propuestas y por “limpiar sus culpas con discursos de barricada en los medios de comunicación”, dijo.
En relación al Gobierno nacional, Bertone dejó en claro que la provincia sufre las consecuencias de una “economía en recesión, con medidas que se han tomado y no compartimos, aunque nos involucran”, mencionó.
En esa línea, dedicó varios minutos a explicar por qué ha decidido priorizar el dialogo con las autoridades nacionales, y se defendió de quienes la “etiquetan” como proclive a sus políticas, a la vez que pidió diferenciar la relación institucional de la pertenencia partidaria o ideológica.
“La política nacional no es la deseada por mí pero no se cofundan. Eso no significa construir muros, sino tender puentes y priorizar el dialogo. Esta provincia necesita del Gobierno nacional tal vez como ninguna otra”, indicó.
En ese contexto, no tuvo problemas en agradecer el acompañamiento de los funcionarios nacionales en materia de obras públicas y de infraestructura.
“En muchas áreas nos sentimos acompañados por el Estado nacional. Eso no significa que no mantengamos diferencias. Y a mí no se me van a caer los anillos cuando tenga que golpear puertas o poner el lomo para defender un puesto de trabajo”, sostuvo Bertone en su discurso ante la asamblea legislativa.

Defensa de la industria

En cambio, en materia industrial, la mandataria evaluó que “el sector se derrumbó” a partir de “decisiones económicas del Gobierno nacional que no han sido las mejores”, y que “deterioraron el poder adquisitivo de la gente y produjeron una retracción de la demanda, en muchos casos de productos fabricados en la provincia”, señaló.
A su vez, dijo que la industria promocionada de Tierra del Fuego fue blanco de “numerosos embates mediáticos y de funcionarios nacionales que tuvieron como objetivo postular al régimen industrial fueguino como la madre de todos los males del país, mostrando una ignorancia supina sobre lo que de verdad ocurre en esta provincia”.
En ese contexto, Bertone aclaró que “pese a nuestras diferencias con el Gobierno nacional en esta materia, seguiremos dialogando con respeto, porque sin dialogo no hay solución posible”, advirtió.
“Discutiremos cada medida que nos perjudique y no permitiremos que el impacto caiga en los trabajadores. Lo principal son las personas y los puestos de trabajo”, sostuvo la gobernadora y admitió que se trabaja en la diversificación de productos y en la reconversión de la industria radicada pero “como complemento de lo ya existente”.
También mencionó que uno de los grandes desafíos de su gestión es convencer a las autoridades nacionales de que el encarecimiento de los productos electrónicos “no se debe al costo de fabricación, sino a un problema estructural que tiene el país en la cadena de comercialización de toda su producción”.
Incluso Bertone le pidió al “conjunto de los argentinos” que “reafirmen el pacto de consolidación de la provincia como región estratégica del país”, a la vez que se comprometió a “administrar con responsabilidad” los “recursos y las herramientas” que provengan del ámbito nacional.
“Nuestro país sostuvo el poblamiento de Tierra del Fuego, y ahora debe garantizar su desarrollo. No podemos permitir que se genere un proceso inverso y la gente se vaya de la isla, haciendo naufragar una política de Estado que lleva años de implementación”, aseveró.

Repaso de logros

La Gobernadora fueguina repasó en su discurso los principales logros de su gestión en el último año, y ponderó las medidas para recuperar el sistema de previsión social, la reorganización del Estado, el crecimiento de la recaudación propia, y las fuertes inversiones en materia de obra pública, entre otros puntos.
Bertone recordó que recibió un gobierno con “profunda desarticulación” y una “situación de mayor dramatismo que la esperada”, donde “se pedían adelantos a Nación para pagar salarios y jubilaciones, se subejecutaban recursos como los del Fondo de la Soja, los hospitales no tenían insumos y la provincia había renunciado a hacer obras con recursos propios”.
En cuanto al ex IPAUSS, remarcó que la sanción de las leyes de emergencia permitió pagar las jubilaciones “de octubre a diciembre” y disminuir en un 50% el déficit del organismo.
“Este año vamos a proponer un plan de pago de la deuda histórica que durante más dos décadas no se pagó. No generamos ni licuamos deuda, pagamos la de otros gobiernos. La situación (del sistema) sigue siendo muy delicada pero estamos saliendo de un quebranto que era palpable”, subrayó la mandataria.
La Gobernadora ponderó la creación de la Agencia de Recaudación Fueguina (AREF) y dijo que en un contexto de contracción económica se recaudaron el año pasado $5206 millones, un 36,3% más que en 2015 “sin aumentarle los impuestos a la gente”. Además se “superó la meta de recaudación fijada en el presupuesto”.
En otros ámbitos, Bertone destacó la capacitación de empleados públicos, la articulación con organizaciones no gubernamentales, el rediseño de áreas sociales, las políticas de género y de adicciones, y las medidas emanadas desde la secretaría de Comercio Interior.
También elogió la transformación de los talleres culturales que “dejaron de ser una bolsa de horas cátedra de uso clientelar”, y las políticas de seguridad que incluirán la creación de comisarías y un centro de inteligencia policial de la Patagonia Sur para combatir el narcotráfico.
La Gobernadora habló del plan de modernización de los canales públicos de televisión, y de las obras de infraestructura educativa, como la construcción de escuelas, jardines de infantes y gimnasios.
Dijo que para el inicio del ciclo escolar se intervino el 90% de los 107 edificios donde funcionan colegios, mejorando sus instalaciones de gas, electricidad y gas.
En cuanto a salud, describió la coordinación lograda entre los hospitales y los centros de salud, la incorporación de más de 100 profesionales y la inminente ampliación del Hospital Regional Ushuaia, que pasará de 87 a 135 camas y tendrá 2,5 veces más superficie.
Se refirió además al desarrollo de un polo energético de energías renovables en la zona norte de la isla, a la inversión de más de 200 millones de dólares que se espera en el sector gasífero y a los avances registrados en áreas como el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, el Instituto Fueguino de Turismo, el Instituto Provincial de la Vivienda y la Dirección de Obras Sanitarias.
Dijo que en esta gestión ya se adjudicaron 636 viviendas, más del doble que en la administración anterior, y que ya se cuentan con los fondos para construir otras 1000 casas, además de otras 600 que se realizarán a través de fideicomisos y créditos de autoconstrucción.
Sobre la soberanía de la Islas Malvinas, Bertone recordó el proyecto de enmienda constitucional enviado a la Cámara legislativa, para reafirmar la pertenencia del archipiélago a la jurisdicción fueguina.
“Se lo digo sobre todo a mis funcionarios. Los años electorales no pueden ser años sabáticos para la gestión. Vamos a solucionar problemas y no a generar excusas. Se acabó la mirada de corto plazo. Tengamos una mirada estratégica y de desarrollo”, expresó la mandataria en su discurso de ayer.