yer, a las 19, tuvo lugar en Melo 1854 (CABA) una charla abierta y gratuita a la comunidad: ¿Cuánto sabemos acerca de la conmoción cerebral en el deporte?, que será coordinada por la Dra. Dolores Cardona, Directora de INECO Alto Rendimiento. Y una campaña en las redes sociales para concientizar a los padres, entrenadores y educadores sobre esta patología que se ha incrementado a nivel global.
El Centro de Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) estima que en el 2017 más de 1,7 millones de personas sufrirán alguna lesión cerebral traumática; ya sea una conmoción suave o algo más serio. Durante la última década han aumentado en los Estados Unidos un 60% las visitas a emergencias de niños y adolescentes por TEC, debido a una actividad deportiva o recreacional. Y no sólo es un problema de los estadounidenses, investigadores en Canadá informaron recientemente que cerca de uno de cada cinco adolescentes canadienses ha sufrido un TEC que necesita atención hospitalaria o ha causado que durante al menos cinco minutos hayan quedado inconscientes.
¿Qué es una conmoción cerebral o TEC leve?
Es un tipo de lesión cerebral traumática causada por un golpe o sacudida en la cabeza o en el cuerpo, que hace que la cabeza y el cerebro se muevan rápidamente y repentinamente de adelante hacia atrás. Este movimiento puede hacer que el cerebro rebote o gire dentro del cráneo y provoque cambios químicos en el cerebro haciendo a veces que las células cerebrales se estiren y dañen.
Aunque la mayoría de las personas que sufre un TEC leve se recuperan de forma completa en los días o semanas posteriores al traumatismo, un porcentaje relativamente elevado de estos pacientes pueden presentar un amplio abanico de problemas persistentes y limitantes que constituyen lo que conocemos como “síndrome post-conmocional”. Este síndrome incluye la aparición de síntomas físicos como la fatigabilidad, dolores de cabeza, problemas de conciliación del sueño, sensación de vértigo o mareos; síntomas cognitivos sobre todo problemas de atención y concentración, problemas de memoria, y enlentecimiento de la velocidad de procesamiento; problemas emocionales como la presencia de ansiedad o de cambios de humor; y finalmente problemas conductuales como la aparición de irritabilidad, apatía u otros cambios en el comportamiento habitual de la persona que ha sufrido el traumatismo. Por lo tanto, dichas dificultades pueden generar trastornos en la adaptación al medio sociolaboral . Estudios neuropatológicos, -de los daños cerebrales producidos por el traumatismo- han demostrado que en el TEC leve existen lesiones leves difusas en distintas partes del cerebro: los lóbulos frontales y temporales, el cuerpo calloso y el fórnix.
¿Cómo se puede identificar una conmoción cerebral en el deporte?
La persona está aturdida o desorientada. No está seguro del puesto en que juega, del puntaje, del nombre de su equipo contrario, o dónde se encuentra. Responde a las preguntas con lentitud. Se para y mueve con torpeza. Pierde el conocimiento (aunque sea por muy breve tiempo). No recuerda eventos antes o después del golpe o caída. Y muestra cambios de ánimo, comportamiento o personalidad.
¿Cuáles son los síntomas reportados por alguien que tuvo una conmoción cerebral?
Dolor o presión en la cabeza; nauseas o vómitos; problemas de equilibrios o mareos; visión borrosa o doble; sensibilidad a la luz o el ruido; se siente débil, desorientado o aturdido; se siente confuso o le cuesta concentrarse; no se siente del todo bien.
Signos de peligro más graves a los que se debe prestar atención
Una pupila más grande que la otra; mareo; dolor de cabeza después del golpe; le cuesta hablar bien; debilidad en alguna parte del cuerpo; náuseas o vómitos; pérdida de conocimiento.
Fundación INECO quiere concientizar a la sociedad sobre el tema porque: Muchos niños, adolescentes y adultos que sufren algún golpe en la cabeza, y presentan algún síntoma de conmoción leve, muchas veces regresan a hacer deportes muy pronto mientras el cerebro se está curando. Se ha comprobado que quienes continúan jugando cuando tienen síntomas de conmoción cerebral, o retoman el juego muy pronto, tienen mayor probabilidad de sufrir otra conmoción. Y una conmoción cerebral repetida mientras el cerebro se está curando puede ser muy grave. Para más información: María Alejandra Milia, Prensa y Comunicación INECO, [email protected] 15 3 124 3829