a Municipalidad de Ushuaia se encuentra en proceso de ajuste de tarifas para el transporte público que presta la empresa estatal UISE, tras la pérdida del subsidio nacional. El secretario de Gobierno, César Molina, destacó la importancia de mantener un equilibrio entre la sostenibilidad del servicio y la accesibilidad para los usuarios.
"En principio la idea es resolverlo mañana (por este viernes) ya con el conocimiento del costo que la empresa entiende que debería tener el boleto, que es cercano a los $1.200, que fue lo que nos informaron el viernes pasado", expresó Molina, evidenciando la necesidad de encontrar un nuevo equilibrio financiero.
Molina explicó que, ante la retirada del Gobierno Nacional en el financiamiento del transporte público, la municipalidad busca resolver la actualización tarifaria sin superar los $1.000 por boleto. "La idea es que no supere los $1000. Se va a terminar de definir en el transcurso del día el número final que permita, por un lado, sostener el servicio de transporte público y, por otro lado, reflejar el esfuerzo que el Ejecutivo Municipal va a hacer para sostener y para no llevar el boleto a $1.200, como debería estar", afirmó al respecto.
A pesar del aumento considerable necesario para cubrir los costos operativos, dijo que se priorizará mantener beneficios para personas con discapacidad, bomberos, estudiantes y jubilados. "La idea es, con todos esos componentes sobre la mesa, poder mañana (viernes) resolver un valor que no supere los $1.000, pero que va a llevar un incremento considerable manteniendo los beneficios y a todos aquellos que en la actualidad lo tienen como personas con discapacidad, bomberos, estudiantes de nivel primario, secundario y universitario, y jubilados y jubiladas", sostuvo Molina.
El funcionario resaltó los desafíos económicos que enfrenta el servicio, incluyendo el aumento en los precios de los combustibles y repuestos. Además, citó ejemplos de otras ciudades donde directamente se ha suspendido el transporte público debido a la falta de viabilidad económica por la caída del subsidio dispuesto por el gobierno nacional.
"Estamos debatiendo en algunos lugares, por ejemplo, en una ciudad de Córdoba se anunció directamente que se suspendía el transporte público, que no iban a seguir prestando el servicio. En declaraciones que escuché ayer de parte de la prestadora del servicio en Río Grande, que también habló de que no era viable con un boleto a $700, incluso, sostener el servicio", señaló, destacando la importancia de encontrar soluciones viables para mantener el servicio en funcionamiento.
En el caso de Ushuaia, donde el servicio es prestado por una empresa estatal, se prioriza la calidad y sostenibilidad del servicio sobre la búsqueda de ganancias. "Ushuaia tiene la particularidad de que el servicio lo presta una empresa del Estado, y en ese sentido la ganancia no resulta una variable a buscar, sino que lo que se busca es un servicio que se pueda sostener y que sea de calidad", afirmó el secretario.
A pesar de los obstáculos financieros, César Molina destacó que el transporte público seguirá siendo una opción más económica en comparación con otros medios de transporte. "Pese al retiro del Estado nacional, pese a la liberación de los precios de los combustibles, de los insumos y demás, sostener un servicio que va a seguir siendo, en comparación, más económico que cualquier otro tipo de transporte", enfatizó.
Finalmente, Molina consignó la importancia de mantener el servicio en funcionamiento, destacando la alta demanda reflejada en los números de usuarios registrados. "Para tener de referencia diciembre, por ejemplo, hubo un corte de boleto de casi 210.000, si lo dividimos por las unidades de colectivos que están dando vueltas, más de 1.000 cortes de boletos en el mes por unidad. Es considerable, y la idea es poder sostener el servicio", concluyó el funcionario.
