ras la convocatoria a una mesa política con gobernadores, anunciada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, luego de la derrota electoral que sufrió el oficialismo el último domingo, el mandatario fueguino sostuvo: “No nos vamos a sentar para una foto porque les fue mal el domingo. Primero hay que cumplir los compromisos”, marcando
distancia de cualquier intento de escenificación política sin contenido real.
Críticas a la convocatoria
Melella cuestionó la manera en que el llamado fue realizado: a través de una conferencia de prensa de Adorni y sin los canales institucionales que la relación Nación-Provincias demanda.
“La realidad es que, por una comunicación de Adorni, es poco serio. Si tiene que venir una convocatoria, que venga formalmente. No es una cuestión de redes sociales o de marketing político”, afirmó.
Según el gobernador, no existe margen para sentarse a dialogar mientras el Gobierno nacional no cumpla con obligaciones básicas, como la transferencia de fondos comprometidos en convenios.
“No nos mandaron un peso”
El mandatario recordó que, pese a haber firmado acuerdos por obras y viviendas en un gesto de cooperación, esos compromisos no fueron honrados:
“Yo fui de buena voluntad, siendo uno de los más críticos, y firmé. ¿Qué pasó? No nos mandaron un peso. Primero empiecen a honrar las deudas, a pagar. Después sí, nos sentaremos a dialogar”.
Melella insistió en que no se trata de un rechazo al diálogo en sí mismo, sino a la idea de participar en una foto sin efectos prácticos para las provincias:
“No nos sentamos por una foto de campaña, porque lo que necesitamos es que haya cumplimiento y respeto institucional”.
Presupuesto en la incertidumbre
El gobernador fueguino también advirtió que la falta de lineamientos claros en la política económica nacional complica la elaboración del presupuesto provincial 2026.
“No sabemos ni por dónde viene el presupuesto nacional. No hay variables, no hay datos. Es tan difícil armar un presupuesto de la provincia… ¿en base a qué? ¡Ni a la inteligencia artificial se le puede ocurrir con este Gobierno Nacional!”, ironizó.
En este sentido, sostuvo que la volatilidad económica nacional repercute directamente en la planificación provincial y ejemplificó con lo ocurrido tras las elecciones:
“Miren lo que pasó el domingo: un dólar que valía tanto pasó al doble, y eso te descuajeringa todo”.
Reforma constitucional y planificación
Melella vinculó esta incertidumbre con la necesidad de discutir una reforma de la Constitución provincial que permita mejorar la previsibilidad y las herramientas de gestión. Sin embargo, señaló que resulta complejo proyectar cualquier política pública mientras el escenario nacional carezca de estabilidad.
“Después viene la discusión y hacemos un poco de circo, pero la realidad es que hoy un presupuesto es difícil de pensar. No hay bases mínimas sobre las que proyectar”.
Una postura compartida
La posición de Melella se suma a la de otros mandatarios provinciales del peronismo y de sectores no oficialistas que han manifestado críticas similares hacia la Casa Rosada, en especial por el recorte de fondos y lo que consideran una ausencia de federalismo en la gestión.
Al cerrar sus declaraciones, el gobernador fueguino volvió a remarcar su negativa a participar de una convocatoria sin garantías de seriedad:
“No nos vamos a sentar para una foto por una campaña política porque les fue mal el domingo. Primero hay que cumplir, después hablamos de pactos”.