l secretario de Gobierno de la Municipalidad de Ushuaia, Oscar Souto celebró la firma del convenio de cooperación entre el Ejecutivo y la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) para potenciar el trabajo conjunto en torno a las problemáticas sociales y cotidianas en la ciudad.
En el aire de FM del Sur, Souto destacó que “ya se viene trabajando fuertemente en el área de Turismo con la carrera que tiene la Universidad y las potencialidades de nuestra ciudad, se trabaja también en el boleto estudiantil universitario que no se incluyó cuando se estableció el beneficio para los otros niveles educativos” y advirtió que a partir del convenio “se suman también otras problemáticas y búsqueda de soluciones que están en agenda para ambas instituciones”.
El Secretario de Gobierno valoró la relevancia de la UNTDF al observar que en la ciudad “hay una masa crítica de recursos humanos con gran capacidad técnica y que jamás se aprovechó. Es importante el contacto que mantienen con el territorio, lo están haciendo a nivel provincial y con ambos municipios” y señaló que “la idea de apertura en la Universidad viene de su creación”.
Souto recordó que hubo un trabajo previo de todo el arco político de la provincia promoviendo los proyectos, uno del entonces senador José Martínez y otro de Jorge Colazo, también senador en ese entonces, para la creación de una Universidad Nacional, y la presidenta Cristina Fernandez de Kirchner la convirtió en realidad. “La de Tierra del Fuego fue la primera de un proceso que, en el curso de un año, creó nueve universidades nacionales y además debía ser una universidad que respondiera a las necesidades de los habitantes de la provincia” sostuvo.
El funcionario municipal recordó que “fue muy dificultoso este proceso con la gestión del rector organizador y tuvimos profundas discusiones, pero hoy la Universidad empieza a cumplir el mandato para la que fue creada con todas las autoridades y todos los institutos están muy vinculadas al territorio” y consideró que “para eso están las universidades; para hacer de poleas de transmisión entre las necesidades de la sociedad y la inteligencia que opera académicamente. Esa inteligencia sin un vínculo con la realidad, no tendría razón de ser: serían profesionales que no son útiles para las necesidades de cualquier territorio. Sobre todo en Tierra del Fuego, donde estamos tan distantes de cualquier otro lugar en el país”, valoró.
