n local que pertenece al Gobierno provincial pero que administra una asociación civil vinculada a Nuevo Encuentro, fue clausurado tras detectarse que en su interior se realizaba una fiesta clandestina donde, tras pagas su entrada, cientos de menores consumían alcohol sin límites.
De acuerdo a la información dada a conocer por el Municipio de Río Grande, en la madrugada del sábado y gracias a la denuncia realizada por padres que indicaban la realización de una fiesta de las denominadas “clandestinas” con venta de alcohol a menores, sobre calle Minkiol de Margen sur, personal del Ejecutivo local se dirigió al lugar constatando la veracidad de la situación violatoria de diversas ordenanzas.
La dirección se corresponde con la del local de la conocida agrupación ‘La Mateada’, que con frecuencia se utiliza para actividades del partido Nuevo Encuentro, aunque también se llevan a cabo actividades culturales y solidarias.
Siempre según el parte de prensa municipal, al llegar al lugar los servidores públicos se encontraron con unas 150 personas, dentro del predio conocido como La Mateada, así como en los alrededores, entre ellos una gran cantidad de menores de edad.
Con el ingreso de la delegación municipal, integrada por personal de la Dirección de Comercio, de Tránsito y de Prensa más el apoyo de efectivos de la Comisaría IV de la Policía de Tierra del Fuego, se detectó en el interior del lugar a adolescentes que habrían abonado una entrada para ingresar, como así también se constató la venta clandestina de alcohol.
Funcionarios municipales lograron ubicar a quien aparentemente había alquilado el lugar y se constituiría en organizador de la fiesta nocturna. El sujeto declaró que el salón fue contratado para festejar un cumpleaños, hecho que no pudo ser probado por los adultos entrevistados al requerirse la presencia del supuesto agasajado, quién nunca apareció en el lugar.
Como consecuencia de esta irregularidad, el personal municipal procedió al desalojo del inmueble y el decomiso de la importante cantidad de bebidas alcohólicas encontradas en el lugar. El confuso episodio abrió serios interrogantes acerca de la utilización del edificio que está cedido en comodato y, sucesivamente, subalquilado a título oneroso con fines varios.
El descargo de ‘La Mateada’
Autoridades Nuevo Encuentro, quienes usufructúan el espacio cedido por el Gobierno, publicaron en las redes sociales un extenso descargo tras los hechos que tomaron conocimiento público en las últimas horas.
“La Mateada es un Centro Cultural Autogestionario. Cada grupo o persona que lleva adelante una actividad es responsable por la misma, y colabora con los gastos de mantenimiento y facturas de servicios, por cierto caros. Así se plasma en el Convenio de Comodato que se celebra con los usuarios de las instalaciones”, aseguran en el inicio del descargo.
Y cargaron contra los medios de comunicación que el fin de semana dieron a conocer la noticia: “Ante diversas publicaciones de prensa que tergiversan los hechos y faltan a la verdad en una aparente operación política, en ejercicio de nuestro derecho a réplica y en interés de la comunidad toda, aclaramos que este viernes próximo pasado se prestó el salón a una persona que organizaba el festejo de los 18 años de edad de uno de sus sobrinos, y el Centro Cultural fue clausurado por la Municipalidad, aduciendo presencia de personas menores de edad y existencia de bebidas alcohólicas”.
“La Asociación Civil es ajena al evento y expresamente deslindó por contrato su responsabilidad en el organizador, resultando, sin embargo, indirectamente perjudicada por la clausura que afecta el normal desarrollo de sus actividades socio culturales, entre las que cuentan diversos talleres de arte, así como ayuda escolar y copa de leche a un número importante de niños que asisten a diferentes escuelas de la ciudad”, enfatizan.
Asimismo, adelantan que “en la semana estaremos efectuando las presentaciones pertinentes ante las autoridades competentes, poniendo en evidencia la inexistencia de responsabilidad de nuestra parte por la organización del evento aludido, a la espera de poder, con la mayor celeridad posible, reanudar el normal desarrollo del cronograma de actividades de inclusión social en interés de sectores que no cuentan con posibilidades de acceder a otra infraestructura comunitaria”.
